Internacionales
7/8/2014|1326
Uruguay: la dirección de la FEUU detrás de dos variantes pro-capitalistas
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Elección de rector
La elección del rector en la Universidad de la República (Udelar) encuentra a las dos corrientes que actualmente conducen la FEUU (Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay) detrás de dos variantes pro-capitalistas. Mientras que la mayoría de la FEUU “la lista de los centros” (un frente de las juventudes del Frente Amplio, principalmente del PCU y PS), apoya la candidatura de Alvaro Rico -continuador del rectorado actual y defensor de la denominada Segunda Reforma Universitaria (SRU)-, el Frente Estudiantil Susana Pintos (agrupación que se reclama ‘independiente’ y ‘crítica al gobierno’) impulsa la candidatura de Roberto Markarian (quien plantea bajo una concepción elitista la necesidad de una ‘universidad de punta’). Ambos corrientes en disputa por imponer a su candidato, han colocado a la FEUU detrás de variantes que en esencia representan los mismos intereses; ambos son candidatos del gobierno (los dos vinculados con el PCU) y ambos se posicionan de un modo contrario a la democratización de la universidad.
Dos candidatos al servicio del capital
Rico plantea profundizar la orientación actual de la universidad con la SRU, apostando a una financiación mixta de la Udelar a través de convenios con empresas privadas y organismos estatales, tanto a nivel nacional como regional. Su orientación es la de rebajar los contenidos de las carreras de grado para pasarlos a posgrados pagos, como ya se viene haciendo con la modificación de todos los planes de estudios de la Udelar.
Markarian que a grandes rasgos comparte la orientación general de la SRU, realiza algunas criticas, pero desde una perspectiva más conservadora aún. Es defensor de una universidad elitista a la que sólo ingresen fundamentalmente sectores medios y ricos. En un entrevista en “Brecha” dijo: “Yo creo que no todo el mundo debe entrar a la Udelar” y se mostró contrario a que los trabajadores más empobrecidos ingresen a la universidad. El propio Markarian ha sido lapidario para aquellos que defienden su candidatura desde una supuesta perspectiva ‘crítica’.
Ambos candidatos ya anunciaron que se adaptarán al ahogo presupuestario a la que esta sometida la Udelar por parte del gobierno. Ninguno ha planteado la necesidad de batallar -como lo reclaman los gremios de la educación- por un presupuesto mínimo del 6% del PBI para la enseñanza pública.
Tanto Rico como Markarian pretenden colocar la universidad al servicio del gran capital compartiendo el discurso de unir la universidad con ‘el mundo del trabajo’, adaptando las carreras, la investigación y la extensión en esa perspectiva. El primero pretende llevar adelante esta orientación mediante un gran acuerdo nacional que involucre a todos los ‘actores’, lo que incluye a las cámaras empresariales, la derecha y el gobierno, mientras que el segundo plantea reflotar el Consejo Consultivo, que sienta en la mesa a los empresarios a discutir y opinar sobre la orientación de la universidad publica.
Vayamos por la democratización de la Udelar
Desde la agrupación de estudiantes 1º de Mayo, hemos llamado al movimiento estudiantil a adoptar una posición independiente, y a luchar para que la FEUU rompa con las distintas variantes que pretenden continuar y profundizar la orientación pro-capitalista de nuestra universidad.
La Federación debe constituirse como una oposición a la actual gestión y al conjunto del régimen de gobierno actual, dirigido por las camarillas docentes.
Es nuestra tarea defender y encabezar la lucha por la democratización de la Udelar, contra la privatización y mercantilización de la educación pública, por aumento presupuestal, en definitiva por poner a la universidad al servicio de los trabajadores y de la transformación social.
Lucía Siola