Uruguay se moviliza por el aborto legal en Argentina

Convocatoria del Plenario de Mujeres Trabajadoras y el PT a la embajada Argentina.

En la tarde de hoy, miércoles 8 de agosto, desde el Plenario de Mujeres Trabajadoras convocamos a todo el pueblo uruguayo a concentrar en la embajada de Argentina desde las 18:00 horas, para apoyar el reclamo de nuestras compañeras argentinas y exigirle a los legisladores de la vecina orilla que den el sí a un derecho tan básico como imprescindible para todas las mujeres argentinas, y especialmente para las mujeres pobres que son las que mueren a lo largo y ancho del país en manos del Estado capitalista por causa de los abortos clandestinos. 



En América Latina, el movimiento de mujeres, de la juventud y de toda la clase trabajadora para alcanzar el derecho al aborto está en un ascenso imponente. En Argentina, el país del Papa, la sanción del aborto logró la media sanción en el Congreso, como consecuencia de una movilización de envergadura inédita, que obligó al cambio del voto en contra de una decena de diputados. En Brasil, Paraguay, México, Colombia y diferentes países de Centro América están surgiendo movimientos de lucha por el aborto legal, las gigantescas movilizaciones de las masas por la legalización no son casualidad, se combinan con una profunda crisis de régimen político.



En todos lados, la Iglesia católica interviene activamente contra el derecho al aborto. Existe una acción política organizada de la Iglesia para apartar de esta lucha al movimiento obrero, mediante la intervención de la burocracia sindical, varios sectores del nacionalismo y los “curas villeros”. 



En Nicaragua, el gobierno de los Ortega le ha concedido al clero la prohibición en regla del aborto. Además, las burocracias sindicales y los “movimientos sociales” son agencias del Vaticano para contener el desarrollo de la tendencia a la rebelión social.



En Uruguay, el aborto fue despenalizado en 2012, luego de que la ley de salud sexual y reproductiva sea vetada por el presidente Tabaré Vázquez en 2008, violando la laicidad estatal y con el aval de la ministra de salud pública María Julia Muñoz.



Finalmente, luego de que el Frente Amplio negara los votos necesarios para que la ley se apruebe, y de una reformulación de la ley de salud sexual y reproductiva, en 2012 se aprobó la despenalización del aborto. Tras esta despenalización lo que se esconde son francas concesiones a la iglesia como la objeción de conciencia, y las enormes limitantes y entorpecimientos de la ley. Por ejemplo, si el embarazo pasa de las 13 semanas de gestación no se puede abortar; se creó un equipo interdisciplinario para tratar de convencer a la mujer de que no aborte; y un sin fin de trámites al que es sometida la mujer durante ese proceso, que lejos de acompañar, contener y facilitar, el estado es responsable de marginar y obstruir el derecho al aborto. Por otra parte, el gobierno del Frente Amplio ha habilitado la penetración de propaganda de la Iglesia Católica en instituciones de enseñanza pública: En 2017, en el liceo No 1 de Salto, se dio una charla dictada desde una organización abiertamente católica, la cual fue avalada y organizada por la directora de esta institución. En la charla no sólo se trataba a las mujeres como asesinas por practicarse un aborto, sino también como incapaces de decidir sobre su cuerpo "porque el único que puede decidir es dios", violando la laicidad en la educación pública y dejando en evidencia la avanzada de la iglesia católica en la cooptación de organismos públicos. 



Para arrancarle nuestros derechos al Estado y los gobiernos capitalistas y principalmente para conquistar el aborto legal en Argentina es imprescindible la organización independiente de la mujer, bajo un programa socialista. 



El 8A seamos millones, todos y todas a las calles, para exigir el aborto legal, seguro y gratuito en Argentina y en toda América Latina. 

¡Educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar, aborto legal para no morir!