Juventud

7/6/2012|1225

Abajo la reforma de la educación técnica

Leonel García

EXCLUSIVO DE INTERNET


El gobierno de Macri ha homologado los nuevos planes de estudios que afectan a las técnicas de la ciudad. La reforma no tiene nada que envidiarle a la que está llevando a cabo el gobierno de Scioli. Ambas son el resultado de la "Ley de Educación Técnico-Profesional" impulsada y aprobada en 2005 por el kirchnerismo. La ley fue resistida por más de treinta colegios técnicos de la Capital. El Congreso Nacional y el Poder Ejecutivo hicieron oídos sordos a nuestros reclamos. Hoy, seis años después, los técnicos salimos nuevamente a las calles, y seguimos sin ser escuchados.


¿Qué plantea la ley?


Mantiene la estructura fundamental de la Ley Federal de Menem:


  • continúa con el proceso de municipalización, desligando al Estado Nacional del financiamiento;

  • avanza en la privatización y tercerización, mediante la formación de institutos "Técnicos Superiores";

  • vacía la especialización, reduciendo contenidos teóricos y prácticos, desvalorizando nuestro titulo. Promoviendo de esta forma los institutos superiores;

  • da lugar a la injerencia de las empresas nacionales e internacionales, mediante la formación del Concejo de Educación. Es lo que hoy pasa en el Norte, con las mineras, o en el Sur, con las petroleras, que son las que definen los planes de estudio;

  • mantiene los subsidios a la educación privada en desmedro de la educación gratuita.


¿Y los gremios docentes?


Amet (Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica) ha salido a respaldar la reforma. Junto al resto de la burocracia sindical, se benefician con la emisión de los títulos "Técnicos Superiores". Nuevamente se vendieron por unas monedas.


¿Y la Legislatura?


Todos los bloques, apoyan abiertamente o en forma critica (MST-Proyecto Sur) la ley educativa. Dan por hecho su implementación, y sus críticas, son superficiales. Denuncian a Macri, pero omiten, que este, está llevando a cabo la política educativa como el mejor "camporista". La reforma de la reforma nos lleva directo a la derrota.


¡Los estudiantes y los docentes!


Debemos continuar con la iniciativa, votar un plan de lucha en todos los colegios y movilizarnos hasta impedir la reforma. Esta lucha, como en los ‘90, se puede ganar. Pero es indispensable que los centros de estudiantes se mantengan políticamente independientes de los gobiernos, y del Estado.


Se escucha… se escucha… Técnicos en lucha.