Laura: La discusión de incorporarnos a la UJS la fuimos dando en la agrupación y duró mucho tiempo. Ser una agrupación independiente con una estructura horizontal y sin un programa claro nos hacía perder el horizonte. En la Facultad habíamos llegado a un techo político ocupando todos los espacios posibles en el Centro de Estudiantes y en el Consejo Directivo, entonces decíamos de salir más allá, porque no teníamos dónde contener a compañeros que se recibían y dejaban de estudiar. Fue un debate muy profundo y largo en el que finalmente decidimos, frente a una propuesta del PO, incorporarnos a la UJS y al Partido Obrero. Ahora sigue el debate, siguen las críticas, obviamente, porque es claro que una agrupación independiente con tanta historia siga preguntándose después de tantas pruebas y errores si este es el punto al que teníamos que llegar. Estamos contentos de habernos incorporado, lo vemos positivo. Ahora nuestros militantes se están formando más íntegramente, podemos debatir sobre muchas cosas que antes no podíamos, tenemos material para hacerlo y vamos para adelante.

 

 

Federico: El balance de nuestra incorporación a la UJS es claramente positivo. Está demostrado en el crecimiento y el salto político que dio la agrupación. Hace mucho tiempo que veníamos debatiendo la idea de incorporarnos a algo más grande, de politizarnos más e intervenir políticamente en ámbitos que están por fuera de la Facultad y lo universitario. El debate y la lucha práctica nos acercaron al Partido Obrero y a la UJS, y por eso decidimos incorporar de pleno la agrupación a la UJS. Esto hizo ver varias cuestiones: por un lado, la importancia de la construcción partidaria y del fracaso del independentismo, tema que fue muy importante en el debate en la agrupación en la previa de este Congreso. Todas las agrupaciones independientes surgidas en el Argentinazo han sido cooptadas completamente por el gobierno o han sido disueltas en la nada, como sucedió en la UBA, donde las que no desaparecieron se vendieron.