Este año, el Centro enfrentó ajustes de diverso tipo, desde el recorte en las becas comedor y la falta de insumos para el funcionamiento de los laboratorios, hasta el intento de cierre del gimnasio. La falta de presupuesto ha disparado una pelea entre distintos sectores de las camarillas por el control de las cajas. La conducción es la “7 de septiembre”, y reúne EIA! (Partido Obrero e independientes), La Corriente (CRCR), El Puño (IS) y el FEL. El año pasado, derrotamos con la lucha varias cláusulas de la Coneau. 

 

El marco político en el cual el centro da su pelea es significativo. La “nueva” gestión de la Facultad, encabezada por el radical Salgado, aglutina a elementos de la anterior, y cooptó al otrora sector “progre”, pues el vicedecano Cernuscci, quien hace varios años fuera echado como máxima autoridad por denunciar chanchullos vinculados a la Fundación Facultad de Ingeniería, ahora volvió con ellos-. Así, las autoridades han metido de lleno a la Fiuba en el negocio de la entrega petrolera. A principio de año nombraron a un lobbysta del fracking y la entrega de Vaca Muerta (Bronstein) al frente del Instituto de Gas y Petróleo que funciona en la facultad. Trajeron a la Fiuba a la empresa Roch, que se acaba de asociar a Chevron para la explotación de gas no convencional en Vaca Muerta. En paralelo, los K de Ingeniería se mostraron en la Facultad de Derecho junto al Secretario de Energía de Obama. La lucha por la orientación de las carreras, por tanto, no se da en el vacío.

De un lado, las camarillas de la facultad en todos sus colores están ligadas a poderosos intereses petroleros y financieros; del otro, la defensa de la educación pública está asociada a un planteo de desarrollo industrial al servicio de las mayorías trabajadoras. 

 

Para desplazar a la conducción combativa del CEI se presentarán varias listas. El MLI, por ejemplo, que se presenta como “independiente” para encubrir su kirchnerismo, juega en la interna de las camarillas. Por otro lado, se armó un frente entre La Mella y el Cauce, basado en la demagogia respecto de la “participación” y en la cuidadosa omisión de toda crítica al sector kirchnerista de las autoridades. El Cauce rompió con La Mella en Sociales cuestionando su orientación en la UBA -frentes con cualquiera para enfrentar a la izquierda-, pero prefiere limitar ese planteo a los claustros de esa Facultad. Ninguna de estas listas confronta con la chevronización de las camarillas -no podrían hacerlo porque apoyan, por ejemplo, la reprivatización de YPF-.

 

Defendamos el carácter independiente y de lucha y del CEI votando masivamente por la 7 de Septiembre.