Juventud

1/10/2009|1102

Entrevista a León Masciarelli, compañero reincorporado por la lucha

-¿Cómo comienza el conflicto?

-Yo me tomo una licencia por enfermedad (hipertiroidismo) y mientras estoy de licencia se arma un expediente en contra mío, en el que la gestión y la gente de intendencia (vinculada con las burocracias de Fatun y Sutun) me acusa de robos, faltas injustificadas y varias cosas más. Un expediente armado para golpear al gremio (APU) en el sector de servicios generales, que es donde la burocracia está intentando montar un sindicato paralelo. Ese expediente corre hasta que, tres semanas después de haber retomado mi puesto de trabajo, me llega el telegrama de cesantía.

-¿Qué pasó entonces?

-Yo hablo con la directiva de APU y ellos en un primer momento rechazan que lo mío tuviera un trasfondo político, y encaran mi defensa en forma individual y sólo y exclusivamente desde lo legal. Es decir que lo único que hacen es ponerme un abogado cuando yo ya estaba afuera.
Yo había estado hablando con los compañeros del PO y ellos caracterizaban al conflicto como político y planteaban la necesidad de poner en conocimiento inmediatamente al Cuerpo de Delegados. La directiva lo rechaza también, pero yo igual me presento en el plenario de delegados y expongo mi caso.

-¿Cuál fue la actitud de los delegados?

-El cuerpo exigió a la directiva que mi tema se incorporara inmediatamente a la discución paritaria. La directiva lo aceptó, pero en un primer momento la gestión se negó de plano a discutir mi reincorporación. Sólo después del paro votado por la asamblea la gestión retrocede y me reincorpora en los términos que los trabajadores exigíamos.

-¿Qué conclusión sacás del conflicto?


Que la unidad y la lucha es el único camino para triunfar y para luchar hace falta tener en claro las características del conflicto y qué política debemos llevar adelante. Los compañeros del Partido Obrero fueron los que siempre me apoyaron y los que tuvieron siempre la caracterización y la política correcta, fruto de su organización. Por eso es muy importante poner en pie una fuerte agrupación clasista en APU, para luchar por salario, por la recuperación de la Fatun y para llevar las luchas a la victoria. A la tarea de construir la Agrupación Bordó del Partido Obrero es a la que me comprometo desde ahora.