Juventud

26/9/2013|1287

Fulp: otro congreso vaciado

Se profundiza la parálisis

Con escasa participación de estudiantes, el viernes 13 de septiembre se realizó un nuevo congreso de elección de autoridades de la Federación Universitaria de La Plata. En él se reeligió al Frente 20 de diciembre (Copa -Frente Popular Darío Santillán-, Cepa, Sur, Surcos) que se impuso con 53 votos. En segundo lugar quedó el Frente Nacional, popular y Latinoamericano (JUP, La Cámpora, Miles) con 46 votos. Detrás se colocó el Frente Universitario Progresista (Franja Morada, MOI), que obtuvo 40 votos.


Un balance


La UJS editó una declaración llamando a realizar asambleas por facultad y movilizar masivamente al congreso, para discutir la orientación y dirección de nuestra Federación. Nada de esto interesó a la dirección de la Santillán, y el resultado fue el congreso más chico de los últimos años. Tampoco existió planteo alguno para enfrentar las políticas de ajuste y privatización que vienen llevando adelante las camarillas universitarias.


El congreso tenía un carácter burocrático monumental, pues se realizó tan sólo un mes antes de las nuevas elecciones de todos los centros, con la representación derivada de las anteriores. O sea, una foto vieja. El vaciamiento del congreso va en línea con un profundo impasse de la Fulp. Nuevamente, la elección de autoridades estuvo disociada de la deliberación, sin balance ni propuestas de acción, programa o funcionamiento. En el congreso no estuvieron presentes los estudiantes de Medicina que han sido protagonistas de una de las luchas más importantes que afrontamos este año, ni los compañeros de Naturales que se encuentran hoy luchando contra la acreditación de la carrera de Biología a la Coneau.


La parálisis destruye a la federación como organización de lucha y politización del movimiento estudiantil, hoy sin estrategia ni política definida. Adaptación y compromiso con las camarillas mediante, la Santillán pavimentó el desarrollo del kirchnerismo. Al igual que en el congreso pasado, el FPDS realizó una convocatoria al conjunto de las fuerzas de izquierda a conformar un frente "contra la Franja y el kirchnerismo". Sin embargo, no proponían modificación alguna del estado de cosas, o sea que pretendían neutralizar las críticas recibidas por izquierda sobre la base de la integración.


Nuestro planteo


Junto a otras agrupaciones también críticas, propusimos un frente de toda la izquierda, para derrotar al kirchnerismo y la Franja. Pero para que eso no fuera meramente una "rosca", debía estar atado a un giro de 180 grados en el funcionamiento de la federación. En primer lugar, desde la UJS planteamos que el funcionamiento de la Fulp debía ser sistemático, para que cada agrupación pudiera defender sus posiciones según su representación. Además, hicimos especial hincapié en la realización de un Congreso ordinario en marzo próximo, que reforzaría la lucha contra la asamblea universitaria prevista para abril y terminaría con la manipulación de elegir dirección un mes antes de la votación estudiantil.


Nuestras propuestas encontraron un enérgico rechazo en las comisiones por parte de la conducción. Así, la Santillán privilegió un frente junto al PCR y Libres del Sur (agrupación tributaria de la Franja Morada y las camarillas universitarias). La definición de preservar el actual frente de conducción, con la excusa del consenso, pretende continuar con la neutralización de la federación. Se profundiza su orientación política, la línea de adaptación y "coexistencia pacífica" con las autoridades y la paralización del movimiento de la Fulp.


Desde la UJS queremos una Fulp que esté a la altura de los desafíos que enfrenta la juventud, en un cuadro de bancarrota capitalista, de agotamiento acelerado de la experiencia nacionalista del kirchnerismo, de la necesidad de enfrentar el ajuste del gobierno kirchnerista. Propusimos a las agrupaciones que levantamos esta posición crítica (JG, Cauce, Inti), la conformación de una lista que fuera la expresión de un reagrupamiento de aquellos que entendemos que es necesario superar el impasse actual en el que se encuentra la Fulp. Sin embargo, se negaron, mostrando sus propios límites.


Sobre la base de la delimitación política del gobierno kirchnerista y del impulso de la movilización estudiantil necesitamos avanzar en la recuperación de los centros de estudiantes en noviembre.