Juventud

28/6/2007|998

Intoxicación oficial y organización de los estudiantes

El 14 de junio, los estudiantes secundarios y terciarios, padres de primaria y la Asociación Cooperadora realizamos un corte parcial de la avenida Corrientes (esquina Palestina) para reclamar mejoras edilicias y técnicas para el edificio ubicado en Corrientes al 4200, a donde concurren Primaria y Jardín. También reclamamos la aceleración de las obras de la calle Humahuaca, un mayor control de la calidad del trabajo y de quienes lo supervisan, una auditoría externa sobre el estado de las obras realizadas hasta el momento, y la separación de su cargo del arquitecto Jorge La Greca. La empresa que está trabajando en nuestro colegio es la misma que realizó las obras en el Mariano Acosta (donde un techo cayó sobre los alumnos).


El actual director de Infraestructura Escolar del Gobierno de la Ciudad, Mario Rocco, ha sido procesado por negligencia y vaciamiento en la causa por fallecimiento de dos pacientes en el Hospital Santojanni, en 2005. En ese momento oficiaba como director de Recursos Físicos de Salud.


Pocos minutos después de terminado el corte, en el colegio se produjo la combustión de una caldera, por lo que fueron evacuados los alumnos de Primaria y Jardín. 14 alumnos y una maestra fueron hospitalizados por intoxicación y crisis nerviosas; hubo al menos dos desmayos. Las autoridades del colegio no llamaron al Same (tuvieron que hacerlo los mismos maestros), ni les comunicaron a los padres lo sucedido (éstos se enteraron por los medios o por cadenas telefónicas que ellos mismos realizaron). Tampoco permitieron que los estudiantes de sexto y séptimo grado fueran evacuados, alegando que no tenían autorización de los padres (tuvieron que hacerlo los propios maestros). Estas autoridades incapaces son las mismas que regimentan a los estudiantes, que nos persiguen, que nos ponen inasistencia por realizar movilizaciones, que boicotean nuestras asambleas para evitar que nos organicemos y que suspenden las clases para impedir las medidas que podamos llegar a tomar.


Gracias a nuestra movilización se separó al arquitecto La Greca de la obra y se nos asignó una auditoría externa, pero no hemos tenido respuestas con respecto al resto de nuestras reivindicaciones. Padres, alumnos y docentes hemos decidido en asamblea que los alumnos no asistirán a clase hasta no tener los resultados del informe que garanticen su seguridad.


La lucha dio un salto el jueves siguiente, cuando se realizaron las elecciones de nuestro disuelto Centro de Estudiantes. En un marco de asambleas y de lucha votó casi el 90% del padrón.


Es importante destacar la participación de los padres en los conflictos que se están desarrollando en los diferentes colegios, lo que supone la tarea de construir una Coordinadora de padres que permita colocarlos en una lucha común contra el gobierno.


No dejemos nuestra seguridad en manos de los responsables de la destrucción educativa.