Juventud

10/11/2011|1202

ISFD Nº 29: triunfamos los estudiantes, recuperamos nuestra herramienta de lucha

Romina Canu, secretaria del CE ISFD Nº 29; David Rojas, representante estudiantil en el Consejo Académico; Mauro Spina, UJS Terciarios

El viernes 28 de octubre, los estudiantes del ISFD Nº29, junto al Frente estudiantil EPA (Estudiantes del Profesorado en Acción), culminamos un acontecimiento histórico de enorme significado en el marco de la lucha contra la represión, el amedrentamiento y el patoterismo: recuperamos el centro de estudiantes, que había sido usurpado por el intendente Raúl Othacehé a través de su agrupación Ujem (Unión Justicialista Estudiantil de Merlo) con fraude, persecución y patotas durante las elecciones anteriores, del año 2010, a una semana del asesinato de Mariano Ferreyra.

El Frente que conformamos está constituido por Espora, La Olla, Fuentealba, Izquierda Socialista, estudiantes independientes y nuestra agrupación 20 de Diciembre, fundada por la UJS en el marco de la lucha contra el cierre del CBC de Merlo orquestado por el intendente local.

Durante el año 2010, las elecciones fueron impugnadas por las agrupaciones que defienden la independencia política de los estudiantes, por las irregularidades, la persecución y las amenazas que recibieron muchos compañeros desde el municipio para que voten a la agrupación de Othacehé. La jornada culminó con patotas, policías liberando la zona y los estudiantes de rehenes, obligados a escrutar. Esta fue la manera en que el PJ copó nuestra herramienta de lucha.

Fue un duro golpe contra la educación pública, el movimiento estudiantil y las libertades democráticas. Todo parecía irreversible.

El PJ pudre todo lo que toca

Impuestos como “dirección del centro”, los muchachos de Othacehé hicieron todo lo posible por defender el modelo. Con la plata del municipio armaron un lujoso local frente al instituto, con centro de fotocopiado e Internet. Repartieron prebendas a más no poder, se hicieron de una base social, con el financiamiento que el poder local les suministró a costa de los impuestos carísimos que deben pagar los trabajadores del distrito. Su “gestión” en el centro implicó una “fosilización” de la herramienta popular de los estudiantes. Su método negó por completo a las asambleas y al cuerpo de delegados, en clara obediencia al “modelo” y al régimen de Othacehé. Su lema fue: “Cristina en la Nación-Ujem en el 29”.

Vencedores vencidos

Desde la 20 de Diciembre señalamos con tenaz insistencia que para recuperar el centro debíamos conformar un frente único estudiantil, que aglutine a las agrupaciones combativas bajo un programa concreto en defensa de la educación pública, las libertades democráticas y la unidad con el pueblo en lucha. La experiencia histórica que se vivió en el instituto se desarrolló más rápido que un rayo. Los estudiantes repudiamos el copamiento de Othacehé con el método del fraude y la patota.

También la conformación del Frente de Izquierda repercutió en el terciario. Muchos activistas vieron como positivo que la izquierda no cooptada por los polos patronales se compacte para conquistar tribunos socialistas en los parlamentos y, de esa manera, impulsar y desenvolver los planteos y reivindicaciones de la educación pública en el marco de la crisis mundial y sus secuelas.

El EPA nació en ese contexto, y su perspectiva fue, primero, conquistar representantes estudiantiles en el consejo académico: logramos cinco consejeros y el PJ-Ujem siete. Ya íbamos respirando otro aire en el profesorado.

En octubre nos preparamos para recuperar el centro. Un objetivo enorme, teniendo en cuenta el peso del aparato othacehista y el miedo impuesto por años de la misma intolerancia. Así y todo, los compañeros nos daban fuerza constantemente, por eso decidimos fortalecer el frente estudiantil, diseñamos la campaña y le dimos para adelante.

Las elecciones para elegir la conducción del centro comenzaron un día después de las nacionales, el lunes 24 de octubre, y terminaron el viernes 28. Una de las últimas maniobras del PJ fue armar una tercera lista para dividir votos, la lista “cero” llamada Frente Revolucionario Estudiantil, que pretendió engañar a los estudiantes. El tiro le salió por la culata: se caía de maduro que era un manotazo de ahogado del PJ-Ujem.

Con una gran campaña estudiantil, con plataforma, volantes y un último boca de urna, que nos ubicaba a pocos puntos por alcanzar a la Ujem y recuperar el centro -en el marco del 55% de Cristina a nivel nacional y un 67% a nivel distrital- dijimos: los estudiantes “Podemos”.

Convocamos a estudiantes veedores, abogados y otras agrupaciones para que las elecciones se realicen lo más limpiamente posible. Extendimos comunicados de prensa a los medios de la zona y preparamos los cánticos para el triunfo. Vencimos a los “vencedores”, pero sin el aparato del Estado, la dirección, el punterismo y la patota que necesitaron ellos. A nosotros nos alcanzó decir la verdad, organizarnos, militarla, y el incansable esfuerzo de cada estudiante y activista. Votaron más de mil estudiantes, de los 2.500 que cursan. Los resultados electorales colocaron al EPA 48 votos arriba de la Ujem y dieron 30 votos para la lista divisionista. Ante esta situación, la difamación por parte de Othacehé no se hizo esperar: desde su canal local y el programa “Sesión Permanente” apunta- ron contra la lucha que encarnan los estudiantes y el Partido Obrero para defender la educación pública.

Con este gran triunfo, y parados en la vereda de los trabajadores, estamos escribiendo un nuevo capítulo para el movimiento estudiantil. Un triunfo que nos depara mayores desafíos, para defender el terciario y a la educación publica.