En la sesión del pasado martes 1º de diciembre, convocada a instancias de la Asamblea Socio-ambiental del NOA (ASANOA), un conjunto de organizaciones ambientalistas y sociales de Tucumán, Catamarca y Santiago del Estero expusieron sus denuncias ante el Consejo Superior de la UNT acerca del saqueo y destrucción ambiental que genera Minera Bajo La Alumbrera.

Luego de las exposiciones, los consejeros defendieron el vínculo de la UNT con la multinacional que explota la mina y la recepción de las regalías de Bajo La Alumbrera, y propusieron armar una comisión que estudie el impacto ambiental de esta explotación. Algunos referentes ambientalistas ya habían destacado, que luego de 12 años de producción, todo el mundo sabía lo que la mina estaba ocasionando.  

Pero lo más lamentable de todo fue la actitud del PCR, que forma parte de la conducción de la ASANOA. Su referente, una de las expositoras de la sesión, no planteó que la UNT rechace los fondos de Bajo La Alumbrera, y, mientras los consejeros armaban el teatro, no presionó, aunque era una de las impulsoras de la sesión, para que la cuestión de las regalías forme parte del debate, manteniéndose al margen del mismo. Probablemente, por esta política del PCR, el petitorio que presentó la ASANOA al Consejo Superior tampoco contempla el rechazo de las regalías por parte de la UNT, ni que se ponga fin a la explotación de la Alumbrera.

La Agrupación Naranja de docentes universitarios se hizo presente en la sesión con carteles y una declaración que hacía eje en el rechazo de los fondos de La Alumbrera, en el reclamo a la UNT como titular del dominio donde se realiza la explotación -para que suspenda la misma- y en la necesidad suspender todo el proceso orientado a la explotación de Agua Rica, que multiplicará por tres todo el daño ambiental en el NOA.