Juventud

15/7/2010|1137

SECUNDARIOS EN ACCIÓN

El Suiza y el Moreno, tomados por los estudiantes

La llegada del invierno actuó como un factor revulsivo en los colegios de la capital. La lucha elemental por el gas y la calefacción se une a todo tipo de reclamos. Lo que ocurrió es que el frío hizo sentir en la piel de los secundarios la debacle total de las escuelas públicas. La bronca contra el gobierno de los espías crece día a día. A esta altura, el odio al macrismo ya es un elemento movilizador con peso propio.

La semana pasada, estudiantes, docentes y padres del Acosta “abrazaron” al colegio para reclamar urgentes reformas edilicias (se siguen cayendo los techos). El Normal 1 cortó las calles porque hay ratas deambulando por la escuela. El Centro de Estudiantes del Esnaola organizó un festival multitudinario frente a las puertas del Polo Educativo Saavedra, cuyas obras están paralizadas. A raíz de la explosión de la caja de luz de un aula del actual edificio, los docentes del Esnaola se niegan a dar clases y están organizando diversas medidas de lucha con los alumnos.

¿Lobo Suelto o cordero atado?

En el marco de este proceso, se desarrolló un intenso debate en las reuniones de la Coordinadora Unificada de Estudiantes Secundarios (Cues). “Lobo Suelto” (agrupación de La Mella, con peso en el Buenos Aires) aseguraba que no era el momento para ocupar los colegios.

Según ellos, las tomas que se estaban preparando en varias escuelas debían posponerse en función de realizar una única “toma generalizada” con fecha incierta, que proponían para después de las vacaciones de invierno. Se llegó a teorizar que sin una medida general no se podía conseguir ningún reclamo, por lo que las ocupaciones que se iban a realizar eran perjudiciales ya que restaban fuerzas para la llamada “toma generalizada”.

Lo real es que, sin hacer demasiado caso a las “recomendaciones”, los pibes del Confederación Suiza decidieron ocupar su colegio. No tenían gas ni ningún tipo calefacción: eso les pareció justificación suficiente. Luego de una semana de toma, los funcionarios del Ministerio de Educación tuvieron que ir al colegio, reconocer los problemas edilicios y comenzar las obras.

Los estudiantes del Moreno, que queda a cuadras del Suiza, se enteraron y empezaron a organizarse para sumarse a la medida, incorporando sus propias reivindicaciones. Hasta allá fueron los militantes de “Lobo Suelto” para explicar que no había que ocupar el colegio y que si el Moreno tomaba, se estaba “cagando en el plan de lucha del resto de los secundarios” (sic), por lo que iba a “quedar aislado”. No consiguieron más que aplazar la toma, que fue lo que terminaron votando, a pesar de “Lobo Suelto”, los estudiantes del Moreno.

Finalmente, cualquier “toma generalizada” tiene que comenzar, necesariamente, con ocupaciones particulares, que sólo si son apoyadas pueden expandirse.

Movilización independiente

Es necesario dejar de lado las tendencias conservadoras y apuntar las energías a extender la lucha, sumando más colegios y preparando nuevas medidas para antes y después de las vacaciones. A través de diversas maniobras, las autoridades están tratando de contener y desarticular la lucha. Incluso legisladores kirchneristas y de Proyecto Sur se aparecieron por los colegios, buscando subordinar el movimiento estudiantil a los tiempos de su agenda legislativa. Un proyecto puede estar bien, pero sólo la movilización independiente puede torcerle el brazo a Macri. Por eso, los legisladores deberían preocuparse por sumar a la lucha a los gremios docentes que dirigen, lo cual implicaría un verdadero golpe mortal para el gobierno PRO.