En La Primavera casi no hay trabajo. Y el que existe es en condiciones que atrasan siglos. Recorriendo las casas de la comunidad nos encontramos con jóvenes qom que todos los marzos son llevados a Salta para trabajar en la cosecha del limón. Forzados a vivir en fincas donde duermen hacinados y tienen un baño cada 70 trabajadores, los cosecheros reciben una paga (a destajo) de aproximadamente 100 pesos por día.

 

Les realizamos entrevistas y nos llevamos copias de los recibos de sueldo para realizar una campaña de denuncia. Un porcentaje importante eran descuentos de una obra social y un sindicato (Uatre) que nunca vieron. Algunos todavía no habían cobrado la cosecha pasada. La Moraleja SA tiene más de 6.000 hectáreas y la venia del Estado provincial y nacional -que hacen la vista gorda y que,  como vimos en el curso, es una herramienta de dominación de clase, garante y organizador de las relaciones de explotación capitalistas.