Un escándalo sin precedentes estalló en la UNT. La presentación de un video donde el Secretario del rector Cerisola  intenta sobornar a consejeros alineados con la vicerrectora Pini de Hernández, con quien dirimirá en una próxima asamblea universitaria la elección del nuevo rector, puso de relieve  la podredumbre del actual régimen universitario. El video revela todo un sistema delictivo de manejo de los fondos universitarios, con numerosas agrupaciones estudiantiles compradas. Los votos se venden a 100 mil pesos.

La crisis en el Rectorado viene de lejos. Cuando la vicerrectora anunció que se presentaba como candidata a rector, Cerisola echó a varios funcionarios alineados con la vicerrectora. A partir de allí,  se desató una ola de denuncias recíprocas sobre el gobierno universitario. Las denuncias no sólo revelaron la corrupción y la arbitrariedad, sino también la política de atropellos a los derechos estudiantiles y docentes. 

La división de la camarilla estuvo empujada por cuestiones políticas y económicas. Cerisola, alineado con el alperovichismo, y la vicerrectora, con la UCR, se disputan un presupuesto paralelo de 400 millones de ingresos mineros, de los cuales siete son de “libre disponibilidad”.

Con esos fondos, Cerisola realizó una  campaña frenética en defensa de  la mega minería a cielo abierto y de La Alumbrera, armando un enorme aparato de punteros en todos los claustros.  La vicerrectora, hasta el momento de la división, acompañó esta política sin chistar. De cara a la Asamblea Universitaria, la vicerrectora pretende presentarse como una variante más “prolija” de manejo de los fondos mineros. Pero en su programa no aparece la ruptura con La Alumbrera.

Como telón de fondo, y en el medio de esta crisis, se presentó en la Justicia una denuncia por evasión fiscal contra La Alumbrera, el Ymad y los gobiernos universitarios. Están en juego varios miles de millones de pesos.

Todo el proceso electoral  y la próxima asamblea universitaria están completamente cuestionados. La Asamblea debe ser disuelta: está copada por corruptos, que se valen del voto de los claustros para sus propios negociados. La única salida democrática en defensa de la universidad es que se suspenda la elección de los decanos pertenecientes a las dos camarillas; que se convoquen a asambleas generales en cada facultad, y, de la misma manera, una asamblea general de toda la comunidad universitaria de la UNT, y que,  sobre esas bases, se elija el gobierno para cada casa de estudio y para la propia UNT.   

Llamamos a al movimiento estudiantil, a los docentes y trabajadores no docentes y a los graduados comprometidos con la universidad, a intervenir en esta crisis para imponer:
a) Fuera las camarillas corruptas! Asamblea de la comunidad Universitaria que resuelva la democratización efectiva de la UNT.

b) La ruptura inmediata del convenio con la principal fuente de corrupción y de contaminación de la UNT, la minera Bajo La Alumbrera.

c) Apertura de las cuentas universitarias para una investigación independiente paralela a la que efectúe la Justicia para determinar el destino de los fondos de las mineras y del presupuesto universitario.

Llamamos al conjunto de la comunidad universitaria a autoconvocarse y a concurrir el martes 18 de mayo con estas banderas a las puertas de la Asamblea Universitaria para exigir su disolución, y poner en marcha un verdadero proceso de cambio en la UNT.

Daniel Blanco