Juventud

22/4/2010|1125

Un “Pacto de Olivos” consagra a Tauber como nuevo rector

Se consumó una Asamblea Universitaria reaccionaria

A través de un pacto, que abarca desde los sectores abiertamente reaccionarios hasta los autodenominados ‘progres’, la Asamblea Universitaria eligió a Fernando Tauber como rector el sábado 17.

Se trata de una continuidad de la gestión privatista que condenó a la UNLP a la miseria presupuestaria, promoviendo el autofinanciamiento, donde se multiplicaron y legalizaron los convenios con empresas privadas y los posgrados arancelados. La cúpula de la UNLP viene de participar del Consejo Interuniversitario Nacional, el cual aprobó un “contundente apoyo” al pago de la deuda con las reservas del Banco Central.

El “Pacto de Olivos” contó a su vez con su pata estudiantil. Desde la Franja Morada hasta los chavo-kirchneristas, pasando por la JUP, votaron a Tauber.

El movimiento estudiantil combativo se movilizó para repudiar, impugnar y rechazar la Asamblea reaccionaria, defendiendo el espíritu de las asambleas estudiantiles. La patota y la violencia vinieron del lado del Rectorado.

La presidencia de la FULP (Frente Darío Santillán e Insurrectos), sin embargo, en lugar de denunciar a las camarillas, atacó al Centro de Estudiantes de Bellas Artes y a tres de las fuerzas que somos parte de la mesa ejecutiva de la federación por desconocer “los mandatos desprendidos de los procesos asamblearios abiertos en las facultades”. Faltan a la verdad. Los mandatos de la mayor parte de las asambleas rechazaron los candidatos a decanos. Incluso, muchas de ellas plantearon realizar un congreso extraordinario de la FULP de cara a la Asamblea Universitaria. Esa moción ya había sido aprobada en el congreso ordinario de la FULP de octubre pasado. La presidencia de la FULP no respetó ese mandato y dedicó su comunicado a delimitarse de la izquierda, no de las camarillas reaccionarias.

Más que nunca, defendamos una FULP independiente del gobierno y de las autoridades, democrática y de lucha.