Políticas

1/6/1994|420

Cordobazo

Hace algunos días, Eduardo Galeano (columnista de Página/12) escribió que el lenguaje de la izquierda era “aburrido” y que invocar en estos tiempos a la revolución era un concepto perimido. En Córdoba esta “genial” idea fue asimilada por completo y es por ello que se difundió durante una semana (del 23/5 al 29/5), y por un lapso de 20 minutos diarios, un “entretenido” radioteatro cuyo tema central era conmemorar los 25 años del Cordobazo.


Impulsado por el rector radical Francisco Delich y a través de Radio Universidad, un grupo de actores llevó a la práctica una historieta (que en nada difiere de las de las AFJP), con un guión en el cual aportaron datos y elementos personajes como Elpidio Torres (secretario general del SMATA en esa época, denunciado por Gregorio Flores por haber entregado compañeros a la dictadura), Lucio Garzón Maceda (hoy integrante del FG), Nilo Neder (diputado nacional angelocista), periodistas radicales del diario La Voz del Interior y ex izquierdistas. Los objetivos declarados de la radio, y difundidos profusamente en los días previos a su emisión, eran convertir al Cordobazo en un recuerdo, al estilo de moda “retro”. Es significativo que confluyeran en este “proyecto radiofónico” radicales, el Frente Grande y hasta peronistas “progresistas”; Elpidio Torres fue la “vedette”.


El fin último de emitir este primer radioteatro después de varias décadas y con un tema tan sugestivo como el Cordobazo, es transformar a éste en un hecho “sociológico” que debe ser estudiado como tal en mesas redondas, charlas de café o en alguna tesis de posgrado sin ninguna conexión con las luchas que se llevan adelante estos días, como si pelear contra la dictadura fuera lícito y hacerlo contra un gobierno elegido no lo sea, aunque aplique la misma política de hambre. No es contradictorio, por lo tanto, escuchar en esta radio que trae todos los días a personeros de las AFJP, que critica todas las movilizaciones obreras “porque cortan el tránsito en el casco céntrico”, las huelgas docentes, de estatales o en los hospitales porque no se prestan servicios esenciales, 20 minutos de “refrescante arenga revolucionaria”.


El santiagueñazo, el jujeñazo, las movilizaciones en el Norte, el obrerazo en Santa Cruz, el de los obreros del SMATA o de la UOM en Tierra del Fuego, el repudio masivo a la jubilación privada, las movilizaciones estudiantiles en abogacía y medicina de Córdoba, etc., demuestran que están implícitos los métodos y el espíritu del Cordobazo sin tener que escuchar esta novela.