El boliche Maika Disco, de Baradero fue acusado de realizar actos de discriminación dado que le habría negado el ingreso al local a una persona trans un sábado y a una pareja gay el fin de semana siguiente. El caso cobró notoriedad por su difusión a través de las redes sociales y medios locales.

 

Militantes del Plenario de Trabajadoras y la Unión de Juventudes por el Socialismo de la ciudad repudiaron los hechos y declararon: “es extremadamente grave que sigan sucediendo tales actos de discriminación y violencia hacía el colectivo LGBTI. Denunciamos la impunidad que otorga el Estado para que los boliches. Estas agresiones por orientación sexual que sufren miles de jóvenes y adultos que buscan divertirse, se le suma las discriminaciones por “portación de rostro” o por la forma de vestir”.

 

Los militantes se sumaron a la denuncia de Baradero Diversidad y apoyan las diferentes actividades que se llevan a cabo. El PdT y la UJS llamaron a generar “un espacio de lucha y denuncia contra la marginación, exclusión social y laboral, discriminación y violencia hacia el colectivo LGTBI”, entre otras reivindicaciones de la comunidad.