A 3 meses de la desaparición de Tehuel de la Torre, la capital bonaerense fue sede de una gran movilización que partió desde Fiscalía (7 entre 56 y 57) y culminó frente a la Gobernación y el Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad. La columna fue encabezada por Andrés y Verónica, papá y hermana de Tehuel, que viajaron desde San Vicente para participar de la marcha de la que participaron más de 300 compañeres activistas independientes y de diversas organizaciones de izquierda.

Mientras que el Ministro de Seguridad, Sergio Berni, declara en televisión que se está buscando un cuerpo, la familia, les amigues y autoconvocades reclaman que efectivamente se lo busque y con la presunción de que podría estar con vida, disponiendo de los recursos necesarios.

En la Radio Abierta resonó el reclamo por la aplicación efectiva del cupo laboral travesti-trans, que obtuvo recientemente la media sanción en Diputados, luego de una larga lucha del colectivo LGBT+. Ante esto, las organizaciones políticas y sociales independientes expresamos que no guardamos ni un poco de confianza en el Estado, el cual nunca cumplió en regla con la existente ley provincial “Diana Sacayán” ni el decreto Nacional 721/2020. Recordemos que Tehuel fue visto por última vez cuando se dirigió a Alejandro Korn para trabajar en un supuesto evento como mozo, frente a una propuesta de trabajo informal de parte de Ramos, uno de los sospechosos detenidos.

Mientras tanto, Axel Kicillof y Elizabeth Gómez Alcorta, no solo son los responsables políticos de su desaparición, manteniendo la búsqueda paralizada, con rastrillajes esporádicos, sino que aplican a cuentagotas las normativas existentes de Inclusión Laboral Travesti Trans, bloqueando el acceso del colectivo a trabajo genuino. Los políticos de turno, que se llenan la boca con discurso LGBT friendly son los primeros “transodiantes”.

Se remarcó también que este no es un caso aislado. La semana pasada, fueron encontrados en Salta los restos de Santiago Cancinos, adolescente trans de 14 años, luego de 4 años desaparecido. Un compañere de Venganza Afectiva, organización LGBT+ de la región, expresó su enojo por el suicidio forzado de Lucho Ávila en la cárcel de mujeres de Los Hornos. Lucho era un hombre trans de 25 años que llevaba más de 2 años por un presunto delito de tenencia de drogas para su comercialización, sin condena ni expectativa de juicio. Sufría de ataques de pánico y fue torturado por los penitenciarios con una práctica conocida como “el buzón”, que consiste en el aislamiento total y que terminaron induciendole a la muerte.

En la ciudad de La Plata las redes de trata y el narcotráfico, regentadas por la policía en connivencia con el municipio de Garro, son responsables de numerosos casos de desapariciones de compañeres y compañeras.

Como dijo nuestra compañera Juli Rosas en la radio abierta: “Si hoy tuvimos acá presentes a los familiares de Tehuel es porque nadie los acompaña, desde el Estado los dejan desamparados. Que estén acá es fruto de la lucha que viene dando el periodismo independiente de la región (que se contactaron con elles) y que se apoyen en nosotres es algo que nos tiene que dar más fuerza para seguir en las calles y seguir dándole fuerza a esta gran Coordinadora por Tehuel. Es fundamental que podamos seguir organizando todas las distintas acciones de lucha que sean necesarias hasta que Tehuel aparezca con vida. Sin lugar a dudas, el camino está en las calles”.

Aparición con vida ya de Tehuel. Justicia por Lucho y Santiago. Aplicación inmediata del cupo laboral travesti-trans. El Estado es responsable.