En estas horas, la aparición de un cuerpo en el río Chubut mantiene al país en vilo. 

 

Las usinas oficiales corren la versión de que podría tratarse del cadáver de Santiago Maldonado. Sus ropas son similares a las que utilizaba Santiago el 1 de agosto, cuando participó del corte de la comunidad Cushamen en la ruta 40 por la libertad de Facundo Jones Huala y fue reprimido por la Gendarmería.

 

Si se tratara del cuerpo de Maldonado, todavía falta develar muchas incógnitas. En primer lugar, cómo pudo haber aparecido 300 metros río arriba del último sitio donde fue visto con vida, en un área rastrillada tres veces; o por qué no se utilizaron antes los perros entrenados que se emplearon esta vez.

 

Ni lerdos ni perezosos, los medios oficialistas comienzan a desplegar una campaña para culpabilizar a la comunidad mapuche. Del mismo modo que, en estos dos últimos meses, se hicieron eco de las versiones difundidas por Patricia Bullrich y la Gendarmería: que Santiago estaba escondido; que había realizado un “sacrificio”, a pedido de los mapuche, para perjudicar al gobierno; que había sido malherido en una pelea con un puestero; o que se había fugado a Chile –“un 20% de posibilidades”, según las infames declaraciones de Elisa Carrió. 

 

El Encuentro Memoria Verdad y Justicia convoca a concentrar esta tarde, a partir de las 18, en Plaza de Mayo.

“Santiago fue secuestrado por la Gendarmería el 1 de agosto cuando cortaba la ruta exigiendo la libertad del Lonko Facundo Jones Huala. El gobierno nacional desplegó,  desde el primer día,  una campaña de encubrimiento y negación del secuestro de Santiago. Hoy varios funcionarios del gobierno, que sólo hablaban de Santiago para abrir hipótesis falsas sobre su desaparición negando su secuestro en manos de la Gendarmería, han viajado a la ciudad de Esquel no se sabe con qué fin”, reseña una declaración de los organismos de derechos humanos que integran el EMVyJ.

 

Seguimos exigiendo la Aparición con Vida y el castigo a los culpables políticos y materiales de su secuestro.

 

El gobierno es responsable.