Barrio Zavaleta: Vecinos plantean controlar a la Gendarmería

E. D.

El asesinato en Villa Zavaleta del niño de 9 años, Kevin Molina, producto de una balacera entre bandas narcos, luego de que la Gendarmería liberara la zona, ha dado lugar a una importante experiencia popular en el barrio. Impulsado por la organización La Garganta Poderosa -cuya redacción fue allanada por un grupo de gendarmes-y luego de una movilización popular, se planteó la creación del primer centro de control vecinal para denunciar los abusos de las fuerzas de seguridad. El mismo funcionará con miembros electos por asambleas vecinales.


La Gendarmería y la "seguridad democrática"


Esta iniciativa surge al cabo de la experiencia que realizaron los vecinos de Zavaleta frente al accionar de Gendarmería y Prefectura, que fueron enviadas al sur de la Ciudad por el gobierno nacional. El llamado "Operativo Cinturón Sur" (creado por Nilda Garré) buscaba poner coto al régimen de la Federal en las villas, que se había desmadrado por completo. El argumento era que las dos fuerzas no registraban el grado de descomposición de la Federal. Sin embargo, el intento de sustituir un aparato represivo por otro, sin una transformación en las bases sociales a las que sirven esas fuerzas de seguridad, se demostró como completamente inútil.


La movilización del barrio Zavaleta frente al asesinato de Kevin y el planteo de un control popular sobre estas fuerzas son la expresión del fracaso de la política de seguridad del kirchnerismo, que ahora se dispone a profundizar esta orientación con la militarización de los barrios pobres del conurbano y la designación de Granados.


En sentido totalmente contrario, en una reunión con vecinos de la Villa 1-11-14 meses atrás, el candidato del Frente de Izquierda, Jorge Altamira, planteó la creación de comisiones vecinales electas en asamblea para controlar a la Gendarmería frente a las reiteradas inquietudes de los asistentes en ese sentido.