Libertades democráticas
2/11/2000|686
Dos presos de la tablada internados en grave estado de salud
Que se cumpla con el reclamo de los presos
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La farsa suele ser compañera de la tragedia. Farsa, la del Gobierno de De la Rúa que después de 50 días de huelga de hambre de los presos de La Tablada se viene a acordar de que ‘el gobierno está hondamente preocupado sobre el tema’. Los familiares de los presos tuvieron que hacer huelga de hambre porque ningún funcionario del gobierno quería atenderlos. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA ha reclamado que se cumpla con los derechos establecidos en el Pacto de San José de Costa Rica, incorporados a la Constitución en la reforma de 1994. En la Convención Americana de Derechos Humanos se señala el derecho a apelar en una segunda instancia judicial superior. Recordemos que los compañeros de La Tablada fueron condenados, en un fraudulento juicio, a cadena perpetua, negándoseles la posibilidad de apelación en el marco de la Ley de Defensa de la Democracia, que en un elocuente lapsus de clase el diario La Nación confunde en un artículo de la semana pasada como ley de “Defensa de la Competencia”.
El reclamo de los presos es tan elemental como que se cumpla con la Constitución. El proyecto que envió la Presidencia al Congreso plantea claramente que al dárseles la posibilidad de apelar de ninguna manera van a poder ser liberados a partir de la aplicación del “dos por uno”.
Pero ni los mismos legisladores aliancistas están de acuerdo en aprobarlo, en nombre de la opinión pública o, mejor dicho, ‘la opinión que publica’ (La Nación, Clarín y compañía).
Claudio Rodríguez y Miguel Aguirre fueron internados de urgencia en el Hospital Fernández ante el estado crítico de su salud. Hace días que están sufriendo daños físicos irreversibles y hoy están acariciando la muerte.
Es necesario redoblar la movilización popular para evitar la tragedia, para conseguir la libertad de todos los compañeros que son presos políticos de este régimen de entrega y corrupción. Que no se imponga la miseria de los ‘demócratas’ del PJ y la Alianza; impongamos en las calles la libertad de los compañeros.