Libertades democráticas
12/4/2012|1217
El Partido Obrero repudia el ataque a las Madres de Plaza de Mayo del Alto Valle
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-Exclusivo de internet
El lunes 26 de marzo, casi 48 horas después de la masiva movilización a 36 años del golpe militar, la Casa de las Madres de Plaza de Mayo de Neuquén y Alto Valle fue blanco de un atentado.
Cuatro balazos en el frente del local y vivienda de la familia Ragni (en el mismo lugar de donde se llevaron a su hijo Oscar) fueron un mensaje mafioso, justamente a pocos días del inicio del juicio a los genocidas de la región.
Este hecho se suma a una seguidilla de acciones, las que expresan las maniobras de protección e impunidad a los genocidas.
El juicio se inició luego de muchas postergaciones y cambio de lugar para evitar el ingreso de los más de dos mil acreditados para presenciarlo -entre ellos víctimas, testigos, organizaciones de derechos humanos, sociales, sindicales, estudiantiles y políticas.
El primer día del juicio, desde las combis del servicio penitenciario que trasladaban a los genocidas, se arrojó gas lacrimógeno a los manifestantes.
Repudiamos todos estos hechos y hacemos responsable al gobierno y a los órganos judiciales de lo acontecido. También exigimos la clarificación del atentado en la Casa de las Madres de Plaza de Mayo de Neuquén y Alto Valle, quienes defienden una posición independiente del gobierno provincial y nacional, ya que rechazan y denuncian la cooptación política del gobierno K.
En Neuquén -la llamada capital de los derechos humanos- junto a los compañeros detenidos y desaparecidos -luego de una serie de crímenes impunes, desapariciones y represiones por parte del aparato represivo y las patotas sindicales (como en Aqualic), así como la comprobación de tareas de espionaje sobre los luchadores (como los obreros de Stefani y los trabajadores estatales)- exigimos defender, como lo hacen las Madres neuquinas, la independencia política y la lucha unitaria para que todos los responsables vayan presos y sean condenados.
Al cumplirse los cinco años del asesinato del compañero Carlos Fuentealba, estos hechos ratifican esta exigencia frente a un gobierno que se apresta a ejecutar las garantías de impunidad a favor del represor Sobisch.
Juicio y castigo a los genocidas y a los responsables del atentado a las Madres de Plaza de Mayo del Alto Valle.
Abajo la ley antiterrorista y el Proyecto X.
Cárcel a Sobisch.