El Poder Judicial de Mercedes defiende los intereses patronales

Luego de obtener la absolución en primera instancia de los obreros de Fargo, acusados de privación ilegítima de la libertad, en el marco de una huelga contra despidos y mejoras salariales, la Cámara de Apelaciones y Criminales de Mercedes los condenó a dos años condicionales.

Dicha condena coincidió oportunamente con nuevas huelga de Fargo de este año.

El Tribunal de apelaciones no se ha quedado solo en cuestionar los alcances del derecho de huelga y condenar en base a atribuir a los imputados el rol de “dirigentes” de la huelga. Ante la presentación de la defensa de la apelación de la sentencia, ha denegado el recurso, lo que podría significar que la misma quede firme, además de vulnerar el derecho constitucional de “doble instancia”.

La denegación está basada en las restricciones que ha introducido la reforma del Código Procesal Penal en la provincia de Buenos Aires, llevada adelante por el gobierno de Scioli, que elimina la instancia de Casación para la revisión de sentencias de delitos menores de  seis años, ignorando de un plumazo toda la incorporación mediante la Constitución Nacional y provincial de los tratados de derechos humanos incorporados.

Detrás de razones “jurídicas y procesales”, lo que queda reflejado es una cerrada postura que tiene por objetivo la criminalización de las luchas obreras, ante su incremento en particular en la jurisdicción de la provincia de Buenos Aires.

Ante el intento de dejar firme esta sentencia nos movilizamos el viernes 6 de noviembre, a las 11 horas, ante la Suprema Corte de Justicia bonaerense, para que resuelva la admisión y la resolución favorable del Recurso de Inconstitucionalidad interpuesto para que se permita la revisión del fallo condenatorio.