¿Espionaje “legal”?

A comienzos del gobierno de Menem el PO denunció la existencia de una orden del ministerio del Interior para realizar espionaje político sobre la izquierda (PO, MAS). Las denuncias del “arrepentido” en el caso Lestelle confirmaron esta denuncia. Resulta particularmente grave que el fallo de la Cámara en el caso del PL no declare ilegal este tipo de espionaje. El fallo rechaza los informes policiales de “inteligencia” por considerarlos “subjetivos” y “no guardar relación con los hechos investigados”. ¿Si el espionaje estuviese “bien hecho”, entonces no habría nada que objetarle? Este aspecto del fallo, que por omisión legalizaría algo que la Constitución prohíbe, hace necesario redoblar la campaña por el desmantelamiento de todos los aparatos de espionaje político.