Gatillo fácil en Tucumán: la movilización logró que los asesinos de Miguel Reyes Pérez sean imputados

Sigue la lucha por juicio y castigo. Separación inmediata de los efectivos acusados.


Como resultado de la lucha que viene llevando Ana Reales junto a la Mesa de Apoyo a la causa de “Justicia para Reyes”, se logró la imputación de los dos policías que asesinaron a su hijo, Miguel Reyes Pérez. 


 


Miguel era un joven de una de las barriadas de San Miguel de Tucumán, que fue atacado el 24 de diciembre por dos policías de la patrulla urbana, Mauro Navarro y Gerardo Figueroa, quienes prestaban servicio en la Comisaria Cuarta. Reyes se encontraba con unos amigos a metros de su casa cuando los policías lo requisaron buscando pruebas de una supuesta denuncia de robo. Como no encontraron nada se retiraron; pero luego, cuando el joven se dirigía a su casa, comenzaron a perseguirlo y a dispararle. El oficial Navarro le dio un tiro en la cabeza y luego un culatazo. Miguel estuvo en coma 23 días y falleció el 16 de enero de 2017.


 


Los familiares de Reyes debieron enfrentar  todo tipo de amenazas por parte de la policía, así como el accionar de la justicia, que no dudó en mantener parada la causa mientras avanzaba con toda celeridad en la investigación del supuesto robo –con lo que pretendían justificar el brutal asesinato. 


 


Luego de numerosas actuaciones por parte de los abogados de Andhes, quienes llevan adelante la querella, y medidas de lucha de la Mesa de Apoyo a la Causa “Justicia por Miguel Reyes Pérez”, se logró la imputación de Navarro y Figueroa –este último recién quedó procesado el 8 de junio.


 


A pesar de este importante avance en la causa, ambos efectivos continúan libres y prestando servicios. En el caso de Figueroa, actualmente se encuentra al cuidado del Colegio San Cayetano, ubicado en el barrio San Cayetano, a cuadras del domicilio de la familia de Miguel. El 16 de junio se hizo una presentación en el Ministerio de Seguridad de la provincia para reclamar que los policías imputados sean apartados inmediatamente de las filas policiales.


 


Desde la Mesa de apoyo existe el compromiso de redoblar la lucha hasta lograr el juicio y castigo a los policías asesinos.