A medida que avanza la cuarentena y el número de los contagios de Covid-19 se dispara, también aumentan los abusos policiales en los barrios populares.

El pasado lunes 25 de mayo, alrededor de las 16 h en el Barrio Néstor Kirchner (José C. Paz) le tocó a Franco (hijo de Marcela, compañera referente del merendero “A todo corazón” del Polo Obrero). Franco se está recuperando de una operación de peritonitis a la que se sometió hace poco. Se encontraba volviendo a su casa en su moto particular cuando lo cruzan, a metros de su casa, 15 patrulleros y 4 motos de la policía bonaerense de Kicillof y Berni. Sin mediar palabras, ni identificarse comienzan a golpearlo. Vecinos, que acercaron videos y fotos, relatan que algunos policías se encargaban de ahorcarlo mientras otros le propinaban terrible paliza con la excusa de que estaba rompiendo la cuarentena.

Pese al repudio y el intento de que suelten a Franco, las y los vecinos y familiares no pudieron evitar que se lo llevaran detenido a la comisaría del  barrio Frino, donde le abrieron una causa por resistencia a la autoridad.

Es muy ilustrativo, la cuarentena funciona como fachada para perseguir y detener a las y los jóvenes de los barrios populares. Mientras los Niki Caputo o las Susana Giménez andan de acá para allá, en los barrios populares solo hay palos y balas, represión y persecución.

Detienen a un trabajador (esencial) de la recolección

Mientras escribimos este artículo, en la estación de José C. Paz, la policía detiene a un trabajador de la recolección que se dirigía a Tres de Febrero a realizar una tarea esencial para el Estado y los gobiernos como es la recolección. Pese a tener el permiso correspondiente, además del barbijo y su ropa de laburo, la policía se lo lleva detenido. Luego de mas de 4 horas detenido por "averiguación de antecedentes fue liberado.

Basta de perseguir a las y los jóvenes

Desde el Polo Obrero y el Partido Obrero hacemos responsable a Berni y Kicillof por cualquier inconveniente que pueda tener Franco en la recuperación de su operación. Llamamos a las y los vecinos a organizarnos en asambleas barriales donde pongamos en pie comisiones que se encarguen de denunciar los abusos policiales y defender a las y los pibes de los barrios.

No necesitamos más policías ni la militarización de los barrios; necesitamos mercadería, kits sanitarios y un seguro al desocupado de $30.000.

¡Basta de criminalizar a la juventud! ¡Fuera la yuta de los barrios!