La Plata: comenzó el juicio a la patota de la CNU

Apel La Plata


Con una gran convocatoria de organismos de derechos humanos y organizaciones políticas, sociales y estudiantiles comenzaron las audiencias del juicio a la patota de la Concentración Nacional Universitaria (CNU), que tiene lugar luego de la enorme movilización contra el fallo de la Corte que benefició con el 2×1 a un genocida.


 


La CNU fue una organización paramilitar de ultraderecha que funcionó como fuerza de choque desde 1971 y continuó actuando durante la última dictadura cívico militar.


 


Al día de la fecha la CNU carga con más de sesenta víctimas en su haber: trabajadores, delegados gremiales y militantes peronistas de izquierda fueron el blanco de los crímenes, hoy reconocidos como de lesa humanidad.  


 



 


Sin embargo en este juicio, a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal Federal Nº 1, sólo se encuentran imputados dos de sus integrantes, Carlos Ernesto "el Indio" Castillo y Juan José "Pipi" Pomares, y se los juzgará por tres hechos, con un saldo de siete víctimas,  ocurridos entre febrero y abril de 1976 –todavía bajo el gobierno de Isabel Martínez de Perón. 


 


Desde la querella de Justicia Ya!, de la cual Apel forma parte, solicitamos al Tribunal antes de la lectura del requerimiento, que quitaran de la sala de audiencias un enorme crucifijo ubicado en la pared central de la sala. Expresamos en primer lugar el agravio que significa para las víctimas brindar sus testimonios frente a una simbología tan negativa, no sólo por la directa vinculación entre la Iglesia católica y el genocidio –es la misma sala de audiencias en donde se condenó al sacerdote Von Wernich por siete homicidios– sino también por las definiciones políticas del clero en torno a la reconciliación de las víctimas y familiares de la última dictadura militar y los genocidas, como así también la defensa del fallo de la Corte que estableció el beneficio de impunidad del 2 x1. El tribunal resolvió por mayoría de los jueces Vega y Esmoris retirar el crucifijo, con la disidencia del Dr. Castelli, quien planteó que la presencia de dicho símbolo religioso era cultural.


 



 


La audiencia finalizó con el llamado a indagatoria de los imputados, en donde Pomares expreso, cuando el presidente del tribunal le realiza preguntas de rutina, que su último trabajo antes de ser detenido en el año 2011,  como asesor del ex senador provincial del Frente para la Victoria y ex secretario de Hacienda del gobierno de Néstor Kirchner, el fallecido Carlos Mosse.  


 


Las audiencias continúan este miércoles, a las 10, en los tribunales de 8 y 50, con los primeros testigos.


 


¡Cárcel perpetua, común y efectiva para todos los genocidas!