Locles: un delito comprobado, una pena menor

El perito que alteró la bala que mató a Mariano

Apel

El Tribunal Oral en lo Criminal N° 16 condenó, el lunes 9, a un año de prisión en suspenso a Roberto Lócles, imputado por intentar inutilizar la bala que asesinó a Mariano Ferreyra en el marco de un peritaje.


Además, los jueces le impusieron a Locles una inhabilitación especial de tres años para desempeñar su profesión.


La sentencia fue bastante menor a lo solicitado por las partes acusadoras. La fiscalía había pedido dos años y la inhabilitación por ocho años, la querella del Cels pidió tres años y tres meses, así como el doble de inhabilitación. Nuestra querella solicitó tres años y ocho meses y el doble de inhabilitación.


Cuando se peritó el proyectil que mató a Mariano Ferreyra para determinar si lo había hecho mediante un disparo directo o rebote, Locles tomó el proyectil y lo golpeó reiteradamente sobre una mesa, alterando la parte sobre la que se realizaba la pericia, ante la mirada azorada de ocho testigos.


La defensa del perito fue victimizarse y mentir sobre las circunstancias de lo acaecido.


En el juicio, sin embargo, quedó demostrado que el fraude de Locles fue una pieza más en las conspiraciones entre Pedraza, Fernández y sus abogados, durante los días en que intentaban digitar con sobornos a los camaristas que debían decidir sobre una eventual excarcelación de la patota criminal. Al respecto, el fiscal de la causa citó las escuchas entre el abogado Igounet y Juan Carlos Fernández, segundo de Pedraza, ambos condenados a 15 años hoy. En ella, Igounet garantizaba que Locles iba a decir en el juicio que "el disparo venía de los compañeros de Mariano".


La zona de la bala que alteró Locles permitía determinar no sólo el rebote, sino también la dirección de los disparos. La alteración apuntaba a sembrar dudas sobre el material que era objeto de peritaje e introducir una falsa hipótesis de investigación en beneficio de Pedraza y su patota.


A la luz de las graves implicancias de este intento de fraude, la condena aplicada a Locles es mínima. Con todo, el desarrollo de este juicio fortalece nuestras razones en el juicio principal, en cuanto al accionar de la burocracia sindical que llevó adelante el crimen de Mariano y trabajó incansablemente para encubrir su responsabilidad y las evidencias de su accionar. El tribunal que los condenó por el asesinato de Mariano Ferreyra y la tentativa de asesinato de Elsa Rodríguez caracterizó a la intromisión del perito contratado por los burócratas en la causa como una maniobra más para intentar mejorar su situación de imputados, al igual que el intento de coima de la Cámara de Casación.