Movilización por el desprocesamiento de los choferes de la Línea 60

Con motivo de la primera audiencia oral en el juicio contra activistas de la Linea 60, más de 300 trabajadores y dirigentes de distintos gremios, se concentraron frente al palacio de Tribunales. Se trata de un juicio penal impulsado por la patronal de la empresa –Monsa- contra cinco activistas de la emblemática huelga de 45 días de dicha línea, en el 2015. Paradójicamente, la patronal acusa de violencia a los huelguistas, habiendo sido ella la que contrató barrabravas que atacaron a los trabajadores para quebrar la medida. Esta acción judicial revanchista, donde no se descarta la prisión efectiva de los compañeros acusados, forma parte de una ofensiva más general de regimentación de la vida gremial interna de la línea, que incluye despidos hormiga sistemáticos de los trabajadores más veteranos y una amenaza de “procedimiento preventivo de crisis” y eliminación de ramales y cabeceras, que incluirían fuertes recortes de personal.


Durante la audiencia, que duró varias horas -y pasó a cuarto intermedio para el viernes 27 a las 10.30 am- una radio abierta, a las puertas del tribunal, expresó la solidaridad con los perseguidos de parte de decenas de dirigentes y activistas de diferentes gremios, entre los que se contaron Alejandro Crespo (secretario general del Sutna), Ileana Celotto (de la conducción de AGD-UBA) y Pablo Eibuszyc (integrante de la directiva de Foetra por la minoría). El reclamo común fue derrotar la judicialización y persecución de los luchadores mediante la acción directa, superando la inacción actual de las centrales obreras burocratizadas.