“No fue en vano”

Juan José "El Gallego" Cuello declaró en la causa Esma III


El “Gallego”, militante de Política Obrera, hoy Partido Obrero, fue secuestrado el 15 de septiembre de 1977 por una patota del ejército que lo trasladó al Regimiento de Patricios, en Palermo, donde fue salvajemente torturado durante tres días, para ser llevado en cautiverio a la Escuela de Mecánica de la Armada.


 


“En Política Obrera no atacamos a los grupos guerrilleros, pero estamos en desacuerdo con los métodos”, le dijo a un compañero de cautiverio, militante del ERP.


 


En la Esma permaneció detenido-desaparecido durante 27 días más. Allí nuevamente lo interrogaron por Fernando Sánchez y Gustavo Grassi “Mondragón”, que también habían sido secuestrados en el mismo mes de septiembre, pasando por distintos centros hasta llegar a la Esma. Fernando y “Mondra”, continúan desaparecidos.


 


En los interrogatorios le exhibieron volantes firmados por Política Obrera que decían: “Que aparezca Juan José Cuello”, y telegramas enviados por el socialismo francés reclamando su aparición. Fue Marcelo “Chelo” Arias, dirigente de PO quien asesoró a los padres de Cuello para realizar habeas corpus y gestiones en destacamentos militares.


 


El genocida Carlos José Pasos “León”, hoy fallecido, era quien se encargaba de los militantes de PO y la TERS que estaban detenidos-desaparecidos en la Esma. Cuando le informaron a Cuello que lo dejarían en libertad, escuchó que también estaban secuestradas Susana Granica y Laura Dabas de Correa.


 


El “Gallego” recordó que el Partido intervenía desde las primeras reuniones de Familiares de presos políticos (Cuello, Granica y Dabas tenían a sus compañeros Diana Quatrocchi, Horacio Smerkin y Néstor Correa presos a disposición del Poder Ejecutivo Nacional por haber participado en el Villazo).


 


Cuello rindió homenaje a Marcelo Arias, quien fue secuestrado el año siguiente -también llevado a la Esma- y que dio su vida para salvar a otro compañero de PO que pretendían secuestrar, advirtiéndole por teléfono desde la Esma que estaba secuestrado y que iban por él.


 


Finalmente, dijo, emocionado, que “ver la evolución de Política Obrera, donde milité en mi juventud, hoy Partido Obrero en el Frente de Izquierda, es un premio y me hace sentir que mi secuestro no fue en vano.”