Desde las 11 de la mañana se movilizaron en el centro porteño organizaciones sociales, sindicales y políticas para reclamar justicia por Rodolfo Orellana y Marcos Soria, militantes de la CTEP. 

La marcha se dirigió desde 9 de Julio y Avenida de Mayo a las casas de provincia de Buenos Aires y Córdoba. Orellana, referente de la OLP-CTEP fue asesinado el 22 de noviembre en el partido bonaerense de La Matanza, en el marco de una represión de la policía provincial contra familias que protagonizaban una toma de tierras ante la insoportable crisis de vivienda, y en la que fueron detenidos varios de sus compañeros y compañeras. El 24, la policía de Juan Schiaretti ejecutó a Marcos Soria, cuando este intentaba escapar de una golpiza que le propinaban los uniformados en un descampado -tras lo cual el jefe a cargo del operativo amenazó a los testigos, y la fiscalía a cargo no entregó el nombre de los oficiales.

Entre los convocantes a la marcha se encuentran entre otros la CTEP, la CCC, la CTA Autónoma y la gremial de Camioneros y los partidos del Frente de Izquierda, así como el Polo Obrero y otras organizaciones nucleadas en el Plenario Nacional Piquetero.

“Nuestros compañeros están muertos por pelear por derechos para los más pobres”, destacó en diálogo con Prensa Obrera Esteban “Gringo” Castro, dirigente de la CTEP, quien marcó que “la estrategia del poder es la fragmentación social, el acorralamiento y la estigmatización de los movimientos populares, y si nada de eso se puede llevar adelante, directamente el fusilamiento. Estas son las consecuencias de la política de ajuste y represión del gobierno”.

Eduardo Belliboni, dirigente del Polo Obrero, señaló que “estamos marchando con miles de compañeros contra estos asesinatos, contra la barbarie y el ajuste que se está produciendo en este país” y destacó que “esto ya ocurrió con gobiernos anteriores, con Maximiliano Kosteki y Darío Santillán, con Mariano Ferreyra”. Afirmó que el gobierno nacional y los provinciales que aplican el ajuste “son una amenaza a la población, que no vamos a tolerar: vamos a ir contra el ajuste, contra Macri, para que se vayan estos gobernantes y que implementemos en la argentina un plan de lucha por las reivindicaciones populares”. A su turno, María Tango enfatizó en el reclamo de juicio y castigo a los responsables de los crímenes contra Orellana y Soria.

 

La marcha reclamó también la liberación de los militantes que continúan detenidos, y forma parte de una cargada jornada de lucha de la clase obrera: en el Puente Pueyrredón, los trabajadores de Siam realizan un corte contra despidos; en Bariloche tiene lugar una manifestación a un año del asesinato de Rafael Nahuel por parte de Prefectura y en numerosos puntos del país habrá marchas por el Día Internacional por la eliminación de la violencia contra la mujer, donde las organizaciones combativas levantarán un programa para derrotar la ofensiva capitalista y clerical.

La militarización de la Ciudad de Buenos Aires, en las vísperas del cónclave imperialista del G20, no frena la disposición de lucha contra el ajuste y la represión.