Este 28 de agosto tendrá lugar en Tucumán, en consonancia con otras provincias, la marcha nacional contra el gatillo fácil. La iniciativa surgió de familiares de víctimas de Buenos Aires, que ya protagonizaron la primera marcha el año pasado, con el propósito de avanzar en la organización y la lucha a nivel nacional. Entienden que  el gatillo fácil es una de las formas de represión del Estado, así como lo son las desapariciones forzadas y la tortura seguida de muertes en cárceles, comisarías e institutos de menores. Denuncian que lejos de garantizar la seguridad, las fuerzas represivas del Estado están para cuidar a los de arriba, a los empresarios y poderosos y para controlar a los trabajadores, además de manejar el delito organizado como la venta de drogas, y la trata de personas en complicidad con las mafias políticas y judiciales. 

 

En Tucumán, la convocatoria fue tomada por la Mesa de Apoyo a la Causa Justicia por Miguel Reyes, joven asesinado el 24 de diciembre de 2016  por los policías Mauro Navarro y Gerardo Figueroa. La Mesa, integrada por distintas organizaciones de derechos humanos y políticas, viene impulsando acciones para que esta causa avance, además de realizar sistemáticas denuncias sobre la violencia policial en la provincia. 

 

En las reuniones para la organización de la marcha ya hemos acordado una convocatoria que enmarque el gatillo fácil y los atropellos policiales como parte de una orientación política de conjunto por parte del Estado y sus gobiernos que apunta al disciplinamiento y control de los trabajadores y la juventud, cuestión que en el marco del brutal ajuste va a adquirir aún una mayor brutalidad.

 

En la jornada vamos a denunciar el reforzamiento represivo y la política de impunidad con los genocidas por parte del gobierno nacional, que se manifestó en el apoyo al fallo del 2×1 a los represores y los beneficios indebidos de prisión domiciliaria. También levantaremos el reclamo de la aparición con vida de Santiago Maldonado, denunciando que su desaparición es responsabilidad de la Gendarmería que actuó bajo las órdenes de la ministra de Seguridad Patricia Bullrich.

 

La política represiva del gobierno provincial también será otro de los ejes. Bajo el comando  del secretario de Seguridad de la provincia se han instrumentado controles de identidad en colectivos y en la vía pública que agravan la política de persecución a los jóvenes de las barriadas. También el gobierno viene de reprimir la movilización por San Cayetano de las organizaciones que reclaman la emergencia social y alimentaria.

 

Desde el Partido Obrero vamos a preparar una fuerte movilización.