Un nuevo caso de gatillo fácil en Córdoba

Foto: Correpi

La madrugada del viernes 12 de junio en Villa La Tela (en el oeste de la ciudad de Córdoba) la policía disparó por la espalda a Alejandro Amaya, un joven de 15 años. El hecho sucedió en el marco de uno de los tantos operativos represivos que lleva adelante las fuerzas policiales del Estado con la excusa del aislamiento social obligatorio.


Los relatos de vecinos difundidos por organismos de derechos humanos y antirrepresivos marcan que el joven estaba en la casa de su tía cuando vio cómo se acercaba un móvil de la policía disparando. En este cuadro, él corrió a su casa y es en ese momento que recibe el disparo. Luego fue trasladado a la comisaria de Parque República. Ante esto la madre se presentó en el lugar y pidió verlo y la repuesta que tuvo fue que el joven solo tenía un raspón. La mentira salió a la luz cuando fue trasladado al Hospital de Urgencias, donde tuvo que ser intervenido quirúrgicamente.


La acción represiva de la policía de Córdoba no cesa, y tiene que ver con una orientación política definida por el gobierno de la provincia que pretende imponer un Estado policial, en que las libertades democráticas sean dejadas de lado, para establecer una regimentación de ajuste y miseria social.


En Córdoba el gatillo fácil cuenta con la impunidad por parte del Estado. Es por eso que se hace necesario en la inmediatez reforzar la organización y la lucha con un programa de salida que empiece por el control popular de la cuarentena y la satisfacción de todos les reclamos de los trabajadores; desarrollar la perspectiva del desmantelamiento del aparato represivo del Estado y el juicio y castigo a todos les responsables políticos y materiales de los crímenes policiales.