Venado Tuerto- Santa Fe: justicia por Lucas Cabral

Reprimen la movilización que pidió justicia por el asesinato de este joven de 22 años a manos de la policía.

La policía de Venado Tuerto asesinó a un joven trabajador de 22 años, Lucas Cabral, el sábado 25 de julio. La familia convocó a una movilización que se realizó desde la plaza Independencia a la comisaría 2° para reclamar justicia para Lucas y que la paguen todos los responsables. La propia movilización fue reprimida por la policía con golpes y balazos de goma dando cuenta de la impunidad existente. Esta es la “Paz y orden” del gobierno peronista de Omar Perotti.

Según denuncia la familia, Lucas se dirigía en su moto hacia la casa de una amiga cuando fue interceptado por un patrullero que comienza a perseguirlo por el solo hecho de transitar sin permiso en la cuarentena. Facundo Ascudillo Castro sigue desaparecido hace 3 meses porque la policía Bonaerense lo detuvo por el mismo motivo.

El temor a la policía santafesina –fundado en una larga lista de asesinatos y brutalidades policiales- llevó a Lucas a intentar escapar de la persecución policial. Pese a no existir delito alguno, la policía organizó una verdadera cacería que involucró a varias patrullas y a 70 efectivos policiales, según dieron cuenta los testigos. La persecución terminó con una patrulla que embistió a Lucas provocándole la fractura de cráneo y la muerte.

La escena recuerda los acontecimientos que precedieron a los adolescentes de San Miguel del Monte, en Provincia de Buenos Aires, salvo que en esta oportunidad en vez de efectuar disparos, se trató de un asesinato atropellándolo con la patrulla; también a los asesinatos en mano de la policía de Santa Fe de David y Ema, dos jóvenes obreros asesinados en la zona sur de Rosario cuando salían de un boliche y que aún sigue impune. En Venado este nuevo caso de gatillo fácil trae a la memoria el asesinato de Clemente Arona en 1999, asesinado por la policía de la misma manera. ¿Cuántas más víctimas de la narcopolicía santafesina habrá?

La madre de Clemente, que se solidarizó de inmediato con la familia de Lucas, realizó una declaración contundente que ilustra la realidad que sufre la juventud: “Venado Tuerto hoy debe lamentar una vez más lo intolerable, como en todo el país, el abuso desmedido de la maldita policía, que en aras de protección, salen a matar pibes. Paradójicamente quienes deberían garantizar ‘seguridad’ son nuestros verdugos (…) No son casos aislados (…) Son acciones sistemáticas (…) Los verdaderos responsables son nuestros ‘elegidos’ gobernantes”.

Abajo el encubrimiento: justicia por Lucas

Luego del asesinato se ha montado una acción de encubrimiento por parte de la policía y del poder político para presentar el hecho como un “fatal accidente”. Testigos denuncian que se ha modificado la escena del crimen, moviendo de lugar el patrullero que atropelló a Lucas para argumentar que fue Lucas quien chocó contra el patrullero.

La policía no ha emitido aún ningún parte oficial sobre el hecho e incluso el fiscal Blanco, a cargo de la causa, ni se comunicó con la familia. La madre de Lucas denunció que la propia familia tuvo que salir a buscar testigos debido al encubrimiento montado. Muchos de los testigos temen declarar por el temor a las represalias de parte de la policía.

El intendente del Frente Progresista, Leonel Chiarella, también es responsable de este accionar policial.

La brutalidad y la impunidad de la policía santafesina viene de larga data y son muchas las víctimas que dan cuenta de esto. Sus vínculos con el narcotráfico y el delito organizado la convierten en la mayor asociación ilícita de la provincia.

Reclamamos Justicia para Lucas y para todas las víctimas de la represión policial y cárcel para los responsables materiales y políticos de los crímenes.

Para terminar con la inseguridad, hay que desmantelar la maldita policía santafesina.