Libros

16/5/2013|1268

“La Revolución Clausurada”, un debate

En la Facultad de Sociales, el pasado viernes 10, se hizo la presentación del libro La revolución clausurada, publicado por Biblos. Se leyó una intervención de Eduardo Grüner, que prologa el libro, quien no pudo asistir por razones imprevistas. Contó con la presentación de Hernán Camarero, docente de historia y miembro de la Asamblea de Intelectuales del Frente de Izquierda, además de los autores de la obra: Christian Rath y Andrés Roldán.


Cerca de 150 personas, con numeroso público juvenil, siguieron las intervenciones. En la apertura, Rath destacó que Mayo es un episodio revolucionario y que la historia argentina estuvo jalonada de levantamientos, guerras nacionales y guerras civiles. En oposición a la historia oficial, nuestro libro es un intento de explicar el papel jugado por las masas.


El texto de Eduardo Grüner enumera los que, a su juicio, son algunos de los más importantes aportes que hace el libro. Una atención detallada y profunda al contexto internacional, que no va en detrimento de una igualmente intensa atención a la problemática de una cuestión nacional que muchos marxistas han despachado un poco a la ligera. Esta preocupación por la situación internacional -probablemente uno de los hallazgos del texto- abarca la política de las clases dominantes, y también el desarrollo de los movimientos populares. Las masas y la lucha de clases es un hilo rojo de los razonamientos del texto.


Es especialmente importante -dice Grüner- el rol que los autores hacen jugar en su análisis al “ciclo artiguista”. El capítulo correspondiente viene a reparar una falta capital en otras corrientes.


Otra originalidad del texto es el reexamen crítico de las rutinarias imputaciones que se le hacen a Marx (y Engels) por sus análisis históricos sobre América latina, y en particular sobre la figura de Bolívar. Este libro, concluye, debe ser saludado como una contribución decisiva en la Argentina de hoy.


Hernán Camarero, por su parte, destacó el aporte del libro como una novedad en el campo de los debates históricos. Afirmó que recupera la tradición que representó Milcíades Peña, y supera varias de sus falencias y omisiones en un período tan importante como el de la Revolución de Mayo. Camarero critica, en particular, el corte, para él abrupto en 1820. ¿No habría que continuar el período hasta 1829?, se preguntó. Además recomendó considerar el libro de Gabriel Di Meglio para profundizar en la participación de la plebe urbana en las luchas del período.


Andrés Roldán subrayó que el propósito del libro, obviamente polémico, es enfrentar las corrientes que pretenden erigir una nueva “historia oficial”, afín naturalmente al oficialismo de turno, en la trilla de las “historias oficiales” en sus versiones pasadas. Agregó que el proceso de Mayo es una segunda oleada revolucionaria en la que las masas cuestionan el régimen que habían ayudado a construir, lo que va a provocar la reacción violenta y desenfrenada de hacendados y comerciantes. La acusación de “anarquistas” para nuestros gauchos jacobinos fue el pretexto para la represión, el terror y la invasión portuguesa. Cuestionó la impostura de identificar este federalismo democrático y revolucionario con la experiencia liderada por Juan Manuel de Rosas, expresión concentrada de los grandes terratenientes latifundistas.