La lucha de los desocupados

De un tiempo a esta parte los gobiernos nacional, provincial y municipal se dieron la política de intentar desconocer a las organizaciones de desocupados y sus crecientes luchas. Claro que para esto el gobierno tuvo que echar lastre.


Es así como se crearon (con el asesoramiento del Banco Mundial) 400.000 puestos de trabajo a nivel nacional (plan Trabajar), 65.000 en Buenos Aires (plan Barrios, etc). Para confirmar lo dicho, el cupo fijado para Florencio Varela donde la población por debajo del nivel de pobreza es abrumadora, fue de 4.000 y para Berazategui 2.000. Por la lucha del MTD el gobierno se vio obligado a ampliar los cupos en más de 700 puestos en Varela, mientras que en Berazategui nunca superó los 1.600 (200 de los cuales fueron otorgados a la Coordinadora en los barrios donde milita).


Sin embargo, esta política de echar lastre, lejos de aminorar la lucha de los desocupados la potenció, al provocar que 20.000 parados en Berazategui se anoten en lista de espera. Sólo pudo desmontar este proceso cuando prometió nuevas vacantes para marzo y se lanzó al reparto masivo de alimentos.


Dos frentes de lucha


En marzo vencían los ‘contratos’ firmados por los compañeros del Plan Barrios, en octubre del año pasado. La elección de delegados (donde milita la Coordinadora) y la constante movilización al municipio reclamando que no se trabaje los días de lluvia y posteriores, herramientas, materiales, ropa, alimentos, colchones, chapas, etc. y, por sobre todo, contra la eventualidad de los despidos, hizo recular al gobierno. Otorgó así la mayoría de los reclamos y prometió la continuidad del plan hasta el 99. Fortalecidos por esto, algunos compañeros están debatiendo la posibilidad de emprender la lucha reclamando la estabilidad (pase a planta municipal), aumentos de la ‘ayuda’ económica y el medio aguinaldo.


Pero lejos de abrir nuevas vacantes en marzo, que estaban previstas para reemplazar a los que habían ingresado en octubre, tal como lo denunció la Coordinadora en su momento, el gobierno comenzó a despedir selectivamente a compañeros que faltaban por distintos motivos, en los barrios menos organizados. Los desocupados que esperaban con lógica ansiedad la apertura de nuevas vacantes se acercaron a los integrantes de la Coordinadora procurando asesorarse cómo organizarse para luchar. El 29 de abril una delegación de 25 compañeros entregó un petitorio reclamando 200 nuevos puestos de trabajo al intendente Infanzón y la reincorporación de los cesantes, entre otros reclamos. El intendente prometió que elevaría el pedido al Instituto provincial del empleo y nos aseguró que se radicarían nuevas empresas en Berazategui y que no dejaría a ningún desocupado sin comer, prometiendo 80 bolsones mensuales de alimentos. A un mes de entregado el petitorio y habiendo fracasado el PJ en el intento de subordinar a su base desocupada, la Coordinadora ha extendido su influencia a diez barrios, se fortalecen tres nuevas comisiones en los barrios 202, Los Pinos y Los Ciruelos y se prepara una gran movilización para el viernes 12 al Municipio.


  • Por 400 puestos de trabajo.
  • Por la reincorporación de los despidos.
  • Por la efectivización del Plan Barrios (pase a planta municipal).
  • Abajo la arancelización de la salud (Rayos, análisis, etc.).
  • Provisión gratuita de medicamentos.
  • 400 bolsones de alimentos.
  • Pase gratuito en el transporte automotor.
  • Reconección de los servicios (gas, luz).