Operativos por Covid-19 en Villa 20: las organizaciones sociales no nos exponemos más

Con el precedente de contagios masivos en la 31, planteamos a Ciudad y Nación las medidas necesarias y con el personal acorde.

El desembarco de los operativos de Postas de Salud y Detectar (del gobierno nacional y porteño) en la Villa 20, en el barrio de Lugano abrió un debate entre las organizaciones sociales y políticas del barrio sobre las responsabilidades del gobierno en las tareas que hay que llevar a cabo para atender la crisis sanitaria, económica y social vigente.


Los operativos en muchas villas de la Ciudad de Buenos Aires implican la instalación de postas de salud, el recorrido casa por casa detectando vecinos con síntomas y el traslado de los casos sospechosos de Covid-19 a las unidades febriles correspondientes. La propuesta de los gobiernos de Horacio Rodríguez Larreta y Alberto Fernández cuenta con que muchas de estas tareas sean llevadas a cabo directamente por vecinos, militantes, activistas y referentes de las organizaciones sociales de los barrios, colocando a referentes y militantes barriales en situaciones de exposición aun mayor a la que ya viven -como en el caso de la villa 31, donde ello derivó en el contagio masivo entre los militantes de las organizaciones y vecinos, y muertes como las de Ramona Medina (de la Garganta Poderosa) y Agustín Navarro Condori (de Barrios de Pie). Como antecedente, ya la distribución de la asistencia alimentaria que el Instituto de Vivienda de la Ciudad (IVC) acercó a los barrios, y por la cual las mismas organizaciones han reclamado y siguen reclamando (ya que la asistencia no llega a muchos vecinos empadronados), también es llevada adelante por vecinos y militantes barriales junto con personal territorial precarizado del IVC sin los elementos de seguridad necesarios.


Ante el planteo que los ministerios de Salud y de Desarrollo Social de la Ciudad y de la Nación llevaron a una reunión con organizaciones sociales y políticas del barrio, la Mesa Técnica de la Villa 20 –que nuclea a las mismas- elaboró una propuesta de trabajo.


Entre los puntos de la misma, se encuentra la instalación de postas de salud en todos los accesos y sectores de mayor circulación del barrio, con personal profesional, capacitado e idóneo para la realización de las tareas, y remunerado de acuerdo a los convenios colectivos vigentes, con el reconocimiento de que se trata de trabajo insalubre. Asimismo, la instalación de postas rotativas para comedores y merenderos, que tendrán como tarea pulverizar y desinfectar los lugares de asistencia, el traslado individual desde las postas a las Unidades Febriles de Urgencia (UFU) correspondientes, con los métodos de protección adecuados. Por otro lado, se incluye el funcionamiento de las UFU las 24 horas del día los 7 días de la semana, para  la realización de testeos rápidos y de manera masiva. Además se solicita la instalación de las 200 camas de internación en el Hospital Cecilia Grierson y la contratación de personal profesional y de estudiantes de Enfermería para la atención de los infectados. Para el caso de que se detecten positivos en comedores, merenderos o espacios comunitarios, el gobierno debe garantizar nuevos puntos de entrega de raciones o asegurar que estos espacios sigan funcionando, sosteniendo siempre la asistencia alimentaria.


La Mesa Técnica es el organismo existente desde que se puso en marcha el plan de reurbanización del barrio hace más de cuatro años, adonde recurren las organizaciones sociales y políticas para exigir al gobierno que este proceso se lleve a cabo de manera correcta. A su vez, es el ámbito en el que se llevan a cabo discusiones sobre las políticas públicas que se ejecutan sobre el barrio y se elaboran propuestas resultantes de la discusión con los vecinos; en esta oportunidad ha servido para elaborar y elevar todos los reclamos planteados.


El precedente de lo sucedido en la villa 31 refuerza la responsabilidad de los gobiernos de la Ciudad y Nacional en garantizar el derecho a la salud. Las organizaciones sociales deben fiscalizar mediante comités de control que el accionar de aquellos en los barrios atienda las necesidades de los vecinos. Llevemos adelante este debate en todos los barrios: la elaboración colectiva de esta propuesta es un paso adelante en la defensa de la salud y la vida de los vecinos.