Peregrinación “Cayetana”: ¿marcha contra el hambre en defensa el gobierno?

Comenzarán el Luján y culminarán el domingo 7 en Plaza de Mayo por “Pan, Paz, Tierra, Techo y Trabajo”.

Utep.

Las organizaciones sociales de la Utep, del espacio conocido como los “Cayetanos” (Movimiento Evita, CCC, Somos Barrios de Pie, MTE), realizarán una peregrinación desde la Basílica de Luján, culminado el domingo 7 en Plaza de Mayo, bajo las consignas de “Pan, Paz, Tierra, Techo y Trabajo”.

Los convocantes anuncian la peregrinación como una acción dentro del gobierno, sin apuntar al presidente Alberto Fernández y su gestión de ajuste, y levantan como programa el paquete de leyes e iniciativas asistenciales “Tierra, Techo y Trabajo”.

Si bien los Cayetanos suelen realizar actividades todo 7 de agosto, el Día de San Cayetano, la actual se inscribe en el marco de una profunda crisis política y de la movilización callejera contra el ajuste, algo que desde la Utep buscan eludir e incluso maniobrar en favor de la contención.

El paquete legislativo por el que reclaman integra el Salario Básico Universal de miseria que, en palabras el dirigente de la Utep Esteban “Gringo” Castro, los senadores del Frente de Todos habrían reducido a unas cuatro millones de personas: tres millones menos que lo mencionado por Cristina Fernández de Kirchner.

La asunción de Massa como superministro también divide aguas al interior de la Utep y los Cayetanos, con sectores que lo consideran “auspicioso” y arrastran vínculos estrechos (Evita, Somos) y otros, como Grabois, que se mantienen más distantes. Aunque los dos sectores con los pies en el plato.

Son reclamos contra el gobierno

En contra de la política de los convocantes, las consignas genéricas que encabezan la peregrinación chocan de frente con la orientación del gobierno ajustador del Frente de Todos, que “auspicia” profundizarse aún más con Massa.

El crecimiento de la pobreza por vía de la inflación y la liquidación del poder adquisitivo de los trabajadores, en un cuadro de desocupación y ajuste, es parte de las consecuencias de la aplicación del pacto del gobierno con el FMI. El propio “pan”, alimento fundamental en la mesa de las familias obreras, está atado al precio internacional del trigo por la política oficial de promover exportaciones con el ojo puesto en el ingreso de dólares para pagarle al FMI.

No solo es nulo el acceso a la “tierra” para el trabajo y para su hábitat, sino que el gobierno y los gobernadores, propios y ajenos, atacan, judicializan y reprimen los procesos de recuperación de tierras que emergen ante el agravamiento de la crisis social y habitacional del país, con alquileres impagables y un desplazamiento de los trabajadores a los barrios más periféricos.

El gobierno tampoco garantiza el acceso al “trabajo” genuino, más bien acentúa la desocupación. Allí se inscriben las subas a las tasas de interés, medida que refuerza la recesión, e incluso los recortes en la obra pública, en línea con los lineamientos de ajuste fiscal del FMI, algo tan escanciar para atacar la crisis habitacional y generar millones de puestos de trabajo en la construcción y sus derivados.

Hay que derrotar el ajuste

La convocatoria de la Utep elude sentar posición sobre toda esta política, que le niega el pan al hambriento, la tierra al sin techo y el trabajo al desocupado. Como la CGT, actúa en los marcos de la crisis para contener el descontento social, mientras el gobierno profundiza un rumbo antiobrero y antipopular.

La salida a la situación actual implica derrotar la política del gobierno que aplica el ajuste, para así desenvolver un programa independiente, como el que enarbola la Unidad Piquetera, en defensa del trabajo genuino, la ampliación de los programas sociales, el bono de emergencia de $20.000 y alimentos para los comedores populares, entre los principales puntos.

Es el camino con el que se ha conquistado el bono $11.000 para beneficiarios del Potenciar Trabaja, aunque aún insuficiente para satisfacer los reclamos populares. Por estas razones, la Unidad Piquetera insistirá con el planteo dirigido a Batakis, ahora al nuevo ministro, mientras discute las próximas medidas a tomar, invitando a todos los sectores sociales y piqueteros a sumarse a una lucha común contra el ajuste.