Martha, una joven docente, a fines de mayo fue amenazada, golpeada y abusada sexualmente por dos hombres en el barrio La Colorada de Florencio Varela. El ataque cobardemente premeditado llegó al punto en que los violadores utilicen profilácticos para la vejación.​

Como consecuencia de la movilización social que llevó a reclamar en la puerta de la propia fiscalía​ donde vecinas denunciaban la inacción de la justicia, se realizaron allanamientos y finalmente dos jóvenes carreros se entregaron como responsables del hecho.

Hoy, luego de tres meses de lo ocurrido, la familia de Martha denuncia haber recibido amenazas.​ Las notas fueron constantes y encontradas en el propio domicilio la víctima.

Revictimización es un término con el que aprendimos a familiarizarnos. Sí, de las formas más obvias y las que se gestan con el correr del tiempo, cientos de mujeres soportan el peso que el mismo Estado acredita.

Reclamar que las comisarías tomen las denuncias de las mujeres dañadas, golpear las puertas de las fiscalías para que se aceleren los procesos y no los cajoneen, denunciar públicamente las zonas liberadas por parte de la policía en el distrito, donde todo tipo de delito se encuentra a la orden del día.​

En este caso la familia hace responsable al juez de garantías Agüero.

Denunciamos la desprotección a la mujer violada, que no es atendida y que se la somete una y otra vez.​

Repudiamos la dilación de la justicia y reclamamos al Estado la atención integral para todas las mujeres víctimas de abuso. Más que nunca luchemos por una organización independiente del gobierno que contemple todos nuestros reclamos.