Mujer

20/7/2016|1420

Caso Noemí Maliqueo “Durante todo el juicio señalamos la responsabilidad del Estado”

Entrevista con Giselle Moreira, abogada de la familia: “Es la primera condena por jurado de un caso de femicidio”


El caso de Noemí Maliqueo, en la provincia de Neuquén, fue el primer homicidio agravado por femicidio condenado por un jurado popular. La condena contra el asesino -su ex pareja, vinculado al negocio de la droga y con contactos en la policía- fue el resultado de una gran movilización de familiares y organizaciones como el Plenario de Trabajadoras. Entrevistamos a Giselle Moreira, una de las abogadas que llevó adelante la causa judicial.


 


-¿Cuál es tu balance de este fallo y cómo continúa la causa?


 


-El balance que tengo del fallo, es positivo. Es la primera condena por jurado popular por el delito de femicidio. Pudimos demostrar que el homicidio de Noemí Maliqueo tuvo como causa principal la violencia de género y que fue su pareja, Roberto Valdez, quien cometió el femicidio. En este tipo de delito la pena que corresponde según el Código Penal es la de perpetua. Es obvio que esto no resuelve la problemática de la violencia de género que tantas mujeres padecen. A lo largo del juicio señalamos la responsabilidad del Estado, que desfinancia programas sociales y de atención en las problemáticas de violencia de género. Las masivas movilizaciones del #NiUnaMenos en los dos últimos años han logrado colocar la violencia hacia las mujeres en la agenda del debate político nacional. La movilización por el crimen de Noemí también visibiliza este reclamo.


 


-Contanos los obstáculos que tuvieron que enfrentar…


 


-Fueron varios. Desde un primer momento, para que la justicia lo encuadrara como un femicidio, tuvimos que dar una pelea. No había denuncias de violencia de género previas de parte de Noemí, algo que exige el código penal. Durante todo el proceso la Fiscalía actuó obstruyendo y maniobrando para que no pueda ser declarado femicidio. Al mismo tiempo, Valdez estaba prófugo. Tenía una red de protección, usaba varias identidades falsas y manejaba el negocio de la droga. Estuvo prófugo por dos meses. Desde el primer momento denunciamos que a Valdez le dieron 48 horas para que se escapara, hasta que dictaron la orden de captura. La familia salió a pegar afiches con la cara de Valdez, acompañada por las organizaciones de mujeres. Su captura fue el fruto de la presión y de las movilizaciones populares y de la búsqueda incansable de la propia familia.


 


-¿Qué papel jugó el Plenario de Trabajadoras en esta lucha?


 


-El PdT tomó desde el comienzo esta causa, acompañando a sus familiares, organizando las marchas, conferencias de prensa y fue quien nos convocó para asumir la responsabilidad de la representación jurídica. La organización independiente del Estado fue clave a la hora de poner en pie un movimiento por esta causa y lograr una victoria.


 


-¿Cuáles son las tareas ahora?


 


-Seguir acompañando a la familia para que la condena quede firme, ya que aún queda el juicio de cesura y las eventuales impugnaciones. La defensa todavía puede cuestionar la decisión que tomo el jurado. El camino es seguir dando la pelea en las calles y en los juzgados, remarcando el carácter cómplice del Estado y visibilizando la violencia que padecemos las mujeres todos los días en todos los lugares.