Mujer

16/8/2021

Chaco: punteros del PJ explotan sexualmente a mujeres con planes

Élida Mambrín y Rolando “Kilo” Vallejo contaban con la protección de Capitanich.

Comenzó el juicio a Élida Manbrín, que, junto a su esposo fallecido, Rolando “Kilo” Vallejo, ambos punteros del PJ de la provincia de Chaco, obligaban a beneficiarias de planes sociales a prostituirse. Rolando “Kilo” Vallejo estuvo prófugo dos meses y luego apareció suicidado en su domicilio, lo que demuestra que la policía no lo busco en esos dos meses. Élida Manbrín, la viuda, actualmente tiene el beneficio de prisión domiciliaria.

Este caso que conmocionó al Chaco el año pasado, en los meses de febrero y marzo, tiene vínculos totales con todo el poder político de la provincia. Se trata de los punteros del PJ y amigos de Capitanich, quienes a través de la asociación civil “No me olvides” manejaban becas y el plan FOCO. Las beneficiarias eran prostituidas y abusadas por ambos dirigentes quienes las hacían pasear por diferentes organismos del Estado: Jefatura de Policía, Casa de Gobierno, Vialidad provincial, SECHEEP, APA, “presentándolas” como “las chicas de ´kilo´ Vallejo”. Las mujeres que se negaban a prostituirse perdían el plan que percibían. Así lo expuso el fiscal de la causa, luego de la declaración de una testigo que fue escuchada por el tribunal.

El juicio pasó a un cuarto intermedio para el 25 de septiembre. Además de pedir justicia y prisión efectiva para los responsables, debemos analizar que es Estado es completamente responsable del abuso, la prostitución y la vulnerabilidad de las víctimas. Desarrollo Social da autoridad absoluta a los punteros, generando que las personas que quieren separarse de estas organizaciones punteriles pierdan el beneficio, ya que el Estado privilegia al puntero y no a la persona que lo necesita. En otras palabras, los punteros políticos son dueños absolutos de los planes sociales y la violencia que ejercen en quienes lo perciben es avalada por el Estado.

Es necesario eliminar todos estas formas de opresión hacía las trabajadoras, pero es fundamental que nuestro repudio se transforme en lucha contra el Estado y los gobiernos que legitiman está violencia. De ahí que el reclamo del Polo Obrero por trabajo genuino y la universalización de acceso a los planes sociales, que cada persona que lo necesita acceda sin intermediarios. De esta forma se podrá poner fin al clientelismo que ejercen los punteros ligados al Estado. A su vez, es necesario pelear por trabajo genuino como punto de partida para terminar con todas las formas de humillación y mercantilismo sobre los cuerpos de las mujeres y diversidades.