Mujer

24/4/2017

Concejo Deliberante de La Plata aprobó Emergencia en Violencia de Género

Para hacer efectivos sus planteos, es necesario un Consejo Autónomo de las Mujeres.


En la sesión del 19 de abril, por unanimidad, el Concejo Deliberante de La Plata aprobó la declaración de Emergencia en Violencia de Género. La misma, es el resultado de una serie de proyectos presentados por los bloques del FpV-Pj en acuerdo con Cambiemos, luego de las masivas movilizaciones que desde el 2015 reclamamos que el Estado tome medidas contra la violencia hacia las mujeres.


 


La ordenanza aprobada prevé campañas de difusión masiva para la prevención contra la violencia de género, la habilitación de una línea telefónica gratuita para brindar asesoramiento y asistencia a las víctimas, un monitoreo a cargo del municipio sobre las restricciones perimetrales, un subsidio económico para las víctimas, la creación de refugios que cuenten con equipos interdisciplinarios especializados, la capacitación a todo el personal municipal y la implementación en todo el municipio del cupo laboral trans. La ordenanza sale sin presupuesto, la partida necesaria para poner en pie todas estas medidas dependerá de la reasignación que decida hacer el Ejecutivo.


 


La Emergencia ya se ha declarado en numerosas provincias, sin que ello haya implicado mejora en las condiciones de vida de las mujeres. Por ejemplo, un punto clave es la capacitación a todo el personal del municipio, que incluye a la policía local y funcionarios. Este planteamiento genera falsas expectativas, ya que encubre la descomposición de las fuerzas de seguridad estatal, quienes conviven con las mafias de la trata de personas, el narcotráfico, la explotación sexual y los ataques represivos contra el colectivo LGTBI.


 


Con esta ley, el gobierno de María Eugenia Vidal y Jorge Garro ensaya una tentativa de cooptación que busca desviar las reivindicaciones de las mujeres. Sucede que desde el año 2015, cuando bajo el gobierno K comenzaron en la ciudad de La Plata grandes movilizaciones que expresaban la indignación de la enorme mayoría de la población frente las desapariciones y asesinatos de mujeres en todo el país, el movimiento de mujeres ha crecido en número y profundidad, con un programa que coloca en primer lugar la denuncia al Estado como principal responsable sobre la violencia hacia las mujeres, nuestras reivindicaciones laborales y la denuncia al aborto clandestino.


 


Para que la Emergencia en Violencia de género sea efectiva, necesitamos redoblar la movilización independiente del Estado y sus partidos en la  lucha por poner en pie un Consejo Autónomo de la Mujer, independiente de los gobiernos y la Iglesia católica, con presupuesto propio, electo y revocable por las propias mujeres, para aplicar las medidas de asistencia y concientización previstas, que atienda a los intereses de las mujeres trabajadoras.