Mujer

22/2/2017

Córdoba: gran batalla política por el Paro Internacional de Mujeres


 La burocracia sindical busca desvirtuar y neutralizar la medida
 


Las comisiones de género de varios sindicatos nucleados en la CGT de Córdoba han conformado una intersindical que se reúne de forma clandestina para pactar y digitar desde arriba acciones simbólicas, de reflexión, de un par de horas y sin abandono de tareas, todo ello sin participación alguna de las bases. No es de extrañar, la burocracia sindical abandonó totalmente la lucha por las reivindicaciones laborales de género, entre ellas la licencia por maternidad-paternidad, los jardines maternales, lactarios y el día femenino.


 


Estas maniobras de la burocracia, a escondidas de las trabajadoras, cuentan con el conocimiento y la anuencia del colectivo #Niunamenos y sectores ligados al gobierno que hacen las veces de informantes de lo discutido en el espacio organizativo de la marcha, saludan alegremente a los sindicatos que “se suman”, mientras rechazan con toda fuerza nuestro planteo de dirigir una exigencia firme para que se convoque a un paro de 24 horas.


 


La respuesta a los intentos de institucionalizar y contener el alcance de la jornada, se manifiesta en forma contundente en la docencia, que está llamando a asambleas escolares, de delegadas y a la  asamblea general docente a votar y resolver el no inicio de clases el 6 y 7 de marzo y a un paro activo y movilización para el 8 de marzo que derribe el techo salarial de miseria del 18% de Schiaretti y como única forma de imponer el 40% de aumento y la agenda de la mujer trabajadora.


 


Las trabajadoras de SUOEM, ADIUC, Salud, Tamse, mediante sus agrupamientos opositores clasistas, van tomando el mismo camino, realizando presentaciones ante las conducciones gremiales exigiendo el paro y la movilización, y han puesto en marcha la organización de una campaña de agitación con juntada de firmas, adhesiones y fotos para que el paro se garantice desde las bases.


 


Con este mismo método de delimitación de quienes boicotean el paro y pactan el ajuste, lo propio estamos haciendo en cada lugar del interior, en los barrios y entre el movimiento estudiantil que entiende la lucha contra el ajuste y la crisis capitalista como el denominador común de sus reclamos.


 


Por ello, más que nunca, este 8 de marzo la denuncia debe dirigirse al centro del poder político en nuestra provincia, delimitándonos de las burocracias sindicales entregadora y estrechando lazos de este gran movimiento de mujeres con las luchas obreras contra el ajuste en curso.


 


Está planteada la necesidad de una organización independiente de las burocracias sindicales y del gobierno, para imponer un programa de salida a la crisis capitalista con los métodos propios de la clase obrera.


 


¡Arriba el paro internacional de mujeres!