Mujer

4/6/2020

Córdoba movilizada por los derechos de las mujeres y disidencias

La movilización del 3J convocada por la Asamblea Ni Una Menos (Anum) contó con una participación de más de 1.500 personas, convirtiéndose en una de las movilizaciones más importantes en la provincia, durante la cuarentena. La convocatoria, que se desarrolla desde hace cinco años, ganó las calles con las siguientes consignas: basta de femicidios y transfemicidios; presupuesto ya, no al pago de la deuda; el Estado y los gobiernos son responsables.


La marcha fue largamente preparada por una serie de acciones de visibilización y reclamo que se desarrollaron desde la Anum frente al Polo Integral de la Mujer, hoy epicentro de la crisis por el incremento de la violencia. También se realizaron dos concentraciones callejeras, un pañuelazo frente al Arzobispado, varios ruidazos y dos transmisiones en vivo de los documentos elaborados y presentados a las autoridades provinciales. El movimiento desplegó un programa de independencia política y un concreto pliego de reclamos frente a la creciente situación que padecen las mujeres y disidencias.



La deuda es con nosotras y nosotres


El movimiento de mujeres fue empujado a las calles, pese al confinamiento obligatorio, por el brutal incremento de la violencia de género. El Ministerio de la Mujer informó que en los primeros dos meses de cuarentena crecieron un 400% las denuncias por violencia. Sin embargo, la ministra de la Mujer, Claudia Martínez, arrancó la cuarentena con los despidos de las trabajadoras precarizadas del programa “Córdoba Con Ellas”, y reduciendo la brigada de atención en el Polo de la Mujer, sostenida principalmente por monotributistas que trabajan sin protección por $35.000.


En la misma línea se inscribe el tardío “Plan de Emergencia Humanitaria en Violencia de Género”, sustentado con el trabajo gratuito y la precarización laboral de decenas de colaboradoras que asisten sin protección adecuada. O el “Programa de Salud Integral para las Mujeres”, toda una impostura en una provincia donde aún no se garantiza el acceso al aborto no punible, la educación sexual y la anticoncepción gratuita.


La situación coloca nuevamente en el centro la responsabilidad del propio Estado. La desocupación forzosa de miles de docentes, mayoritariamente mujeres; la desprotección laboral y la miseria salarial de las empleadas domésticas y trabajadoras de limpieza; el crecimiento del hambre y la desocupación en las barriadas y la brutal situación que atraviesan las personas trans no recibieron respuesta alguna por parte de Schiaretti. Por el contrario, el PJ local se despachó con un ataque al salario de las municipales y sobre las jubilaciones provinciales


La movilización tuvo lugar justo cuando la Legislatura aprobaba el proyecto oficial de sustentabilidad de la deuda, en sintonía con la subordinación de Fernández al FMI y los acreedores internacionales. El proyecto fue rechazado categóricamente por nuestra legisladora Soledad Díaz, quien estuvo a la cabeza de la movilización del 3J, donde mediante un documento unitario se repudió el pago de la deuda externa usuaria y se reclamó presupuesto ya para atender la situación de mujeres y disidencias.



Grandes ausentes


Desconociendo el debate y las resoluciones de la Anum, sectores que responden al kirchnerismo decidieron no participar de la movilización. Levantando como argumento la defensa de la cuarentena, se lanzaron a una militancia abierta contra la movilización con una acción mediática, convocando a realizar pronunciamientos en las redes sociales. Se trata de una maniobra maliciosa que nada tiene que ver con defender la salud y la vida de las mujeres, en una provincia donde las “actividades exceptuadas” han echado a funcionar la inmensa mayoría de la industria, afectando a grandes concentraciones obreras, mientras Schiaretti utiliza la pandemia para establecer un estado de excepción y persecución contra las y los trabajadores que enfrentan el ajuste.


El accionar divisionista y desmovilizador fue preanunciado con la retirada anticipada de las últimas asambleas. Buscan neutralizar a la Asamblea Ni Una Menos, que sin duda hoy se ha colocado como un factor dinámico y de movilización para el movimiento de mujeres provincial.


Desde el Plenario de Trabajadoras impulsamos decididamente, dentro de la Anum, la acción directa y la movilización, adoptando todos los recaudos sanitarios que fueran necesarios. Impulsamos las presentaciones al Polo de la Mujer, exigimos la interpelación de la ministra Claudia Martínez en la Legislatura, donde presentamos una serie de proyectos de protección a las mujeres, que requieren inmediato tratamiento. Organizamos una asamblea abierta del Plenario de Trabajadoras, y un conversatorio por la ESI y el aborto. Con estas iniciativa colocamos una importante columna de alrededor de 100 compañeras.


Esta importante jornada es un impulso clave para dar continuidad a un plan de acción que coloque en agenda política la situación de violencia, refuerce la lucha por el inmediato tratamiento y aprobación del proyecto por el Aborto Legal, y fusione al potente movimiento de mujeres con la clase obrera para rechazar el pago de una deuda usuraria, con todos los ataques que esto implica para el pueblo trabajador.