Mujer

30/9/2010|1148

¿Derechos humanos? – Misiones: lo único que crece en paz es la trata

Plenario de Trabajadoras (Misiones)

En las últimas semanas han salido a la luz varios casos de intento de secuestro de menores en los horarios de ingreso y salida de las escuelas secundarias. Al parecer, las fuerzas policiales y los medios de comunicación provinciales se encuentran sorprendidos por semejante situación. Fingen ignorar que Misiones es la provincia con mayor cantidad de mujeres víctimas de trata, rescatadas recientemente en burdeles en todo el país, pero llevadas al negocio cuando eran menores de edad (entre 13 y 15 años).

La complicidad policial es tal que los medios denuncian que actuó el mismo grupo de autos en todos los intentos, sin que éstos puedan ser detectados. La “frutillita de postre” la dio un alto funcionario policial al descalificar la denuncia diciendo que el 70% de éstas son falsas, sin aclarar lo que sucede con el otro 30%.

El comercio sexual es impulsado por un sector de la burguesía vinculada al turismo, sector del cual es parte el propio gobernador Kloss. Esto es denunciado con frecuencia en Iguazú, lo mismo que la oferta para pedófilos. Además, el gobierno impulsa los castings para modelos sin importar que algunas agencias son denunciadas internacionalmente como proveedoras de “prostitutas de alto costo” y que en la temporada alta de reclutamiento (primavera-verano) proliferan los castings para agencias de modelos, las que son toleradas sin control alguno que verifique si se encubre algo.

Este negocio no reconoce discriminación étnica y se expande hasta alcanzar a los “consumidores” de la oferta de mujeres, hombres y niños de las comunidades Mbya-guaraní de la provincia. En este cuadro, el Ministerio de Derechos Humanos y su oficina de trata de personas es una figura decorativa, que sirve únicamente para conceder puestos a los punteros de la Renovación.

La Justicia -tanto de los fueros como de competencias federal y provincial- no toma ningún tipo de recaudo para prevenir estos delitos. Su complicidad es tal que la Justicia provincial está metida hasta el caracú en el caso de comercio humano, las adopciones ilegales y en la compra y venta de vientres de mujeres.

En este marco, no es raro que el resto de las fuerzas que ejercen importantes controles en el tráfico vehicular de pasajeros y de cargas, en la supuesta “lucha contra el narcotráfico”, nunca logra “detectar” cuando las jovencitas son trasladadas desde el interior de la provincia hacia el resto del país; tampoco se logra “detectar” el tráfico de mujeres desde el Paraguay.

Ante semejante situación, llamamos a todos las organizaciones estudiantiles, sindicales, barriales, etcétera, a debatir un plan de lucha con movilizaciones, asambleas y tomas de colegios, facultades e instituciones hasta el encarcelamiento de los culpables y sus cómplices en la burocracia estatal y las fuerzas de seguridad.