Mujer

17/7/2014|1323

El Estado, responsable por la desaparición de Luciano Arruga

La Cámara Federal de Casación no toma medidas para el esclarecimiento

Los jueces de la sala IV hicieron lugar al habeas corpus presentado por la familia de Luciano Arruga.

El joven de 16 años salió de su casa de Lomas del Mirador el 31 de enero de 2009, y permanece desaparecido desde esa fecha. La familia ha denunciado desde el principio que Luciano fue conducido al destacamento policial local, y que lo hicieron desaparecer por negarse a robar para la policía.

El fallo revierte los dos rechazos previos al habeas corpus por parte del Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional 1 de Morón y la Sala de la Cámara Federal de Apelaciones de San Martín. Luciano “fue privado ilegalmente de su libertad física ambulatoria por parte de la autoridad pública” (voto de Gemignani, uno de los jueces). La responsabilidad estatal “se extiende al hecho de que en cinco años y seis meses del inicio de la investigación penal nada se supo del paradero del menor, sumado a las irregularidades advertidas durante el comienzo de la investigación”.

El objetivo del habeas corpus es que se busque el cuerpo de Luciano Arruga, mediante una causa paralela a la investigación principal. Otro juez citó el caso Bulacio para defender “el derecho de la víctima y de sus familiares a saber la verdad”.

Familiares y Amigos de Luciano Arruga esperan que esto no quede en una reivindicación simbólica; la Justicia debe encarar la búsqueda de Luciano.

En ese sentido, los jueces intimaron al gobernador Daniel Scioli, a los ministros de Justicia, tanto provincial como nacional, y a la Policía Bonaerense a esclarecer los hechos, pero sin avanzar en lineamientos concretos para llevar adelante esta tarea en forma efectiva y a corto plazo. Tampoco se aparta a la misma fuerza policial, involucrada en su desaparición, de las posibles investigaciones.

Los Familiares y Amigos de Luciano Arruga denuncian la impunidad policial, en su doble carácter de asesina y regente de la inseguridad a través del crimen organizado.


Claudia Ferrero (Apel)