Mujer

6/12/2018

Justicia por Lucía Pérez: la marea verde volvió a sentirse en las calles

Foto nota: Juan Diez

Miles de adolescentes y jóvenes con carteles y fotos, de madres con sus hijas pequeñas;  junto a las columnas de las organizaciones de mujeres, sociales y políticas y referentes de la lucha por los derechos de las mujeres, levantando pancartas y banderas que gritaban “NiUnaMenos”, pañuelos verdes, naranjas y rosas y haciendo resonar los nombres de las víctimas de femicidios al grito de “presente” llenaron ayer una importante y conmovedora movilización en repudio al fallo de impunidad que absolvió a los responsables de la muerte de Lucía Pérez. La movilización denunció que “fue femicidio” y que “el Estado es responsable” y volvió a mostrar la energía del movimiento de mujeres y las reservas de lucha que conserva la marea verde.


Resuelta en una asamblea el lunes anterior, en la cual Marta Montero y Matías Pérez, mamá y hermano de Lucía, plantearon la necesidad de dar continuidad a la movilización callejera que en 2016 impulsó el primer paro nacional de mujeres tras el crimen, la marcha se convocó para revertir el fallo de los jueces Facundo Gómez Urso, Aldo Carnevale y Pablo Viñas, del Tribunal N°1 de Mar Del Plata, que absolvieron a los imputados, y reclamar su destitución.


El recorrido –que implicó un debate entre aquellas organizaciones que planteamos la importancia de ir hasta Plaza de Mayo, centro del poder, y otros espacios que planteaban restringirla a Tribunales– expuso la responsabilidad del Estado: unimos Tribunales con Plaza de Mayo, denunciando a la Justicia que dictó esta sentencia de impunidad y al poder político cómplice. Fue un acierto: la marcha fue creciendo en todo su recorrido y, en Plaza de Mayo, la mamá de Lucía no tuvo reparos en denunciar, frente a la Casa Rosada, la complicidad del gobierno nacional y marplatense en el fallo de impunidad.


La intervención artística a los pies del Obelisco, con decenas de mujeres echadas sobre el asfalto representado las víctimas de femicidios, expresó visualmente el desamparo y los vejámenes sociales a los que estamos expuestas las mujeres.


Los sindicatos combativos (Ademys, AGD-UBA, Sutebas Multicolor, entre otros) sumaron sus columnas luego de llevar adelante una jornada de paro con distintas modalidades y una campaña con fotos en los lugares de trabajo y estudio con las consignas “Justicia por Lucía” y “Fue femicidio”, que más temprano se había difundido por redes sociales. También dijeron presentes la Fuba, la Funa, la CET y la CEB, quienes impulsaron una columna estudiantil conjunta. 


Denuncia en Plaza de Mayo


En Plaza de Mayo, con una entereza admirable, Marta denunció a los jueces “que volvieron a violar a Lucía” y denunció a la justicia que no solo brindó un fallo misógino y discriminatorio, sino que se burló de las explicaciones sobre la violencia de género que se dieron en el tribunal (“a nuestra secretaria no la tratamos mal”), negando pública y explícitamente la opresión de género (“tuvimos una presidenta mujer y una gobernadora mujer”) y justificando la ausencia de desigualdad que existía entre Lucía y los tres hombres acusados. Luego, Marta agregó que la impunidad en el fallo de Lucía se explica por cuestiones más profundas: el negocio del narco en Mar Del Plata “que los compró a todos”.


“Investiguen al municipio, a (el intendente) Arroyo, a Mar del Plata", reclamó Marta, y puso nombre y apellido a los responsables políticos de la muerte de su hija. Marta denunció al poder político que se financia con el narco a la vez que descarga la crisis contra los sectores populares y las familias trabajadoras. “Mar del Plata es feliz para algunos, pero nosotros lo único que hacemos es pagar y pagar”. Finalmente, Marta destacó la importancia de la movilización por Justicia, agradeció la inmensa convocatoria y, haciendo palabras un sentimiento colectivo, dijo “todas somos Lucía” porque volvemos a levantar su lucha por justicia a pesar del amedrentamiento y los reveses.


El hermano de Lucía, Matías, denunció la exposición de la vida privada de su hermana para responsabilizar a la víctima de su muerte. “Hicieron quedar a mi hermana como una drogadicta y una prostituta, como si una drogadicta y prostituta mereciera que la maten”, sentenció, poniendo blanco sobre negro los prejuicios sobre los que se sostiene el fallo.




Gustavo Mellman, padre de Natalia, asesinada en Miramar en 2001, saludó la lucha del movimiento de mujeres por transformar las instituciones del régimen. “Ese cambio lo tenemos que hacer ya en Justicia”, dijo, y gritó “el patriarcado se va a caer”; Nora Cortiñas, que en nombre de las Madres Línea Fundadora repudió a los jueces por culpabilizar y revictimizar a Lucía, y Andrea Antico, compañera de Sergio Maldonado, acompañaron la movilización y a la familia de Lucía en el escenario.


En Mar del Plata, Sabrina Gil, dirigente de @tribunadocenmdp y @pletrabajadoras en la radio abierta luego de la enorme jornada de lucha por #JusticiaPorLucía en la que se movilizaron 20 mil personas, dijo que “nuestra lucha por justicia por Lucia no solamente es por una condena a estos tres femicidas, es una lucha contra el amparo que tuvieron del gobierno municipal. Es una lucha contra la red que vende droga en los barrios y en las escuelas con connivencia policial. Es una lucha contra todo el poder judicial que se dedicó a maniobras y encubrimiento durante todo el juicio. Es una lucha contra el Estado femicida, contra el régimen que necesita la violencia hacia la mujer para legitimar todas las formas de violencia que nos oprime.”




El mismo día de la marcha, Guillermo Kane, diputado bonaerense del Partido Obrero-Frente de Izquierda, presentaba en la legislatura provincial el pedido de jury de enjuiciamiento a los jueces Facundo Gómez Urso, Aldo Carnevale y Pablo Viñas.


La indignación social y acciones de lucha contra el fallo se multiplicaron en todo el país. En Mar del Plata se movilizaron veinte mil personas junto con el papá de Lucia, en Rosario, diez mil. También hubo acciones de lucha en las provincias de Salta, Córdoba, Corrientes, Formosa, Santa Cruz, Misiones y Chubut. El movimiento de mujeres mostró una vez más toda su energía. Tenemos que seguir en la calle para que la Corte Suprema rectifique este fallo y los responsables de la muerte de Lucía paguen y los jueces que los han encubierto sean destituidos; por todos nuestros derechos, porque la perspectiva para el pueblo, para los trabajadores, para la juventud, para las mujeres no es “esperar a 2019 a votar” sino la lucha para terminar con este régimen de opresión.