Nuevamente las calles de Neuquén fueron inundadas por la marea verde este 3J convocada por diversas organizaciones de mujeres, disidencias, sindicales, estudiantiles y la izquierda.

La Multisectorial de Mujeres que integra el Plenario de Trabajadoras, marchó señalando que sin aborto legal y con ajuste, no hay #NiUnaMenos. Ese mismo día presentamos con el Frente de Izquierda en la legislatura un proyecto para instar al Congreso Nacional a tratar y aprobar la ley de interrupción voluntaria del embarazo.

Pero muy bien sabemos que en la situación de crisis que se vive en Argentina, no hay una sola reivindicación que no requiera de una lucha a fondo. 

El ajuste expone potencialmente a las mujeres a una violencia mayor por donde se lo mire. Y la tregua de las burocracias sindicales empalma con el intento de enterrar toda consigna y movilización que choque con los acuerdos y compromisos de los partidos patronales y sus candidatos, con la iglesia y el FMI.

Y en Neuquén el proceso electoral expone crudamente ese campo de reacomodos políticos. Todas las fuerzas patronales que se dicen opositoras a Cambiemos, proponen un “frente patriótico” que ponga a la cabeza al MPN en la ciudad de Neuquén y a su vez sostener la candidatura de Fernández -Fernández a nivel nacional. Y no hacer olas con el debate del aborto. 

Esa nueva situación se manifestó en la movilización de este 3J en Neuquén. Los grupos ligados al llamado frente patriótico, coparon la cabecera de la marcha con un cartel que decía "Se va a caer" a secas, al son de los objetivos electorales del mal autoproclamado “frente antimacrista”. Estos no buscan derrotar a Macri por medio de la movilización y la lucha sino simplemente un recambio patronal en las elecciones. 

Pero acapararon la marcha para llevarla a ninguna parte. Sin acto, sin siquiera un anuncio.

Desde la izquierda, junto a varias organizaciones, resolvimos quedarnos en la avenida y realizar un acto, que señaló la necesidad de defender la independencia política de estos grupos tributarios de los acuerdos con el clero, de unir los pañuelos celestes con los verdes, del ajuste y la represión a cuenta del FMI.

El movimiento de lucha debe tomar nota de esta situación y batallar para llevarla a la victoria en todos los terrenos.