-Contanos tu caso.

-Sufrí violencia por parte de mi ex pareja, papá de mis últimos tres hijos (tengo otros dos de una pareja anterior), que actualmente es guardiacárcel de la Penitenciaría Federal en Salta. Las denuncias están radicadas en esa provincia, pero hasta ahora no tuve ninguna respuesta.

Este año se llevó a mis hijos ilegalmente; gracias a que me moví, tomé contacto con Gabriela Serrano y realizamos la denuncia públicamente, pude recuperarlos, pero los encontré en una situación de total abandono.

Antes de viajar al Encuentro, una jueza de Tucumán le aprobó un nuevo régimen de visitas, desmereciendo toda la situación de violencia que vengo viviendo. Pese a que apelé la sentencia, la policía se presentó en mi domicilio, violentando a mi mamá que estaba al cuidado de ellos para que yo pueda viajar, con una falsa orden de arresto contra mi persona. Gracias a la intervención de mi abogado y que estuvimos coordinando con las compañeras de PDT, pudimos evitar que se llevaran a mis hijos, mientras mi ex pareja esperaba escondido en un auto fuera de mi casa con pasajes listos para irse a Salta.

Estas situaciones me impiden conseguir un trabajo, alterando la vida de mis hijos, hoy dependo de mi madre y del apoyo de toda mi familia.

-¿Qué reflexión te llevas al haber participado por primera vez en el Encuentro? ¿Cómo fue tu experiencia con el PDT?

-En lo personal, siento más fuerza para luchar y seguir mostrando como vivimos muchas mujeres víctimas de violencia.

Participé del taller de Violencia, y a pesar que el espacio que nos dieron era muy chico para la cantidad de mujeres que éramos, pude contar mi caso y me sorprendió la violencia con la que intervenían las mujeres ligadas al gobierno que a todas costas nos querían hacer callar cuando denunciábamos al Estado. En el acto de cierre fui violentada por estas mismas mujeres, cuando quise subir al escenario para contar mi historia.

Con respecto a viajar con el PDT me sentí muy contenida, que esta lucha no la hago sola y agradezco haber podido conocer a mujeres trabajadoras víctimas. pero muy imponente en la lucha que nos toca vivir.

Pienso seguir en la lucha, ahora con más fuerza, para haya justicia y así poder desarrollar mi vida con tranquilidad.