Carla Garoni, adolescente de 15 años del barrio de La Boca, se encuentra desaparecida desde el 13 de noviembre. Salió de su casa hacia la escuela pero nunca llegó. Como ocurre en otros casos, en la desaparición de Carla se hizo sentir la desidia policial. Al anochecer de ese día, los padres fueron a la Comisaría 24 de La Boca a denunciar la desaparición de Carla, pero no se la tomaron con el argumento de que la denuncia es la “última instancia” y condicionaron la búsqueda a la espera de las 24 horas de la “ausencia”. Un atropello a las propias leyes, protocolos, tratados y convenciones del A, B, C de la actuación inmediata ante la desaparición de personas.

La Comisaría 24 es la misma que fue intervenida por sus nexos de corrupción y violación de los derechos humanos. Sin embargo, los interventores perpetuaron esas prácticas y métodos condenando a los jóvenes y familias pobres a ser víctimas del gatillo fácil, de desapariciones, de apremios ilegales, de la droga, etc.

El Estado es el primero en negar a la humilde familia de Carla una vía efectiva de búsqueda, en tanto también es responsable de la propia desaparición de ésta y todas las adolescentes, niñas/os y mujeres desaparecidas.

La Comisaría recién tomó la denuncia el 14 bajo la carátula de “Averiguación de paradero”. A la fecha, la causa se encuentra en la fiscalía y no hay noticias de avances concretos por parte de la Justicia.

María Isabel, mamá de Carla, convoca a todas las organizaciones, vecinos, sindicatos, escuelas, docentes y estudiantes a tomar, desenvolver y acompañar la campaña por la Aparición Ya de Carla Garoni, y a los medios de comunicación para difundir el caso. La fiscalía, el GCBA, y los ministerios de Justicia de la Ciudad como de la Nación tienen que dar respuesta.