Mujer

16/10/2017

Próximo ENM: Chubut

Nueva sede, viejas maniobras


Entre 1.500 y 2.000 mujeres llegaron al Club Sarmiento de Resistencia para el cierre del Encuentro Nacional de Mujeres en el Chaco. 


El "aplausómetro" dio por resultado que en 2018 la nueva sede será la provincia de Chubut. Frente a un Encuentro masivo, aunque muy lejos de los números publicados por las organizadoras, el cierre reflejó la regimentación y el vaciamiento impulsado por la Comisión Organizadora en aras de promover acuerdos que se cocinan por fuera de la decisión y del debate de las propias mujeres. 


La Comisión Organizadora, dirigida por el Pcr en acuerdo con el gobierno provincial de Peppo y Capitanich (un pacto entre los que, hace apenas unos años, se dividieron por el voto no positivo y el conflicto del campo en 2008), violentó en el Encuentro de Rosario la decisión de que el siguiente se hiciera en Caba, algo que había sido la expresión absolutamente mayoritaria en los talleres, como se manifestó de manera contundente en el acto de cierre. Algunos sectores que defendimos la sede de Caba para 2017 estuvimos ausentes de este nuevo cierre por la determinación de dar la espalda a un evento totalmente regimentado que representa un verdadero ataque para con las miles que hacemos un enorme esfuerzo por defender la masividad del Encuentro y por debatir y hacer crecer este enorme movimiento de mujeres. 


El Encuentro reagrupa a miles de mujeres que, de manera excepcional, ponen sobre la mesa las necesidades y la opresión que viven las mujeres bajo este régimen social; pero es terreno de la manipulación política de intereses ajenos a los expresados por las mujeres, incluso hasta llegar a pactar a espaldas de ellas acuerdos con el clero y con sectores políticos enemigos de sus derechos. 


En esta oportunidad, el Pcr puso los huevos en dos canastas. Viene siendo atacado por impedir que el encuentro se transforme en una enorme herramienta política contra las políticas gubernamentales.  Es por esto que decidió armar una coartada para responder a los reclamos de no querer acercarse al poder político. Las organizadoras colocaron La Plata, con el apoyo de Patria Grande y el Movimiento Evita y también Chubut, defendida por los sectores sindicales kirchneristas y del aplauso de otros sectores del Pcr. Finalmente, sectores claramente identificados con el Pcr votaron en menor medida a la sede La Plata y con mayor impulso y acompañadas por sindicatos kirchneristas como judiciales o Ate, consagraron Chubut. 


Macri puede estar contento, una alianza entre sectores kirchneristas y pejotistas volvió a evitarle el mal trago de que miles de mujeres deliberen en sus barbas y resuelvan acciones para responsabilizar al Estado y a los gobiernos de la violencia que se desata sobre ellas día a día. 


Iremos a Chubut, como lo hicimos de forma masiva en el Chaco, para seguir reforzando el trabajo por una alternativa independiente del clero y de los gobiernos capitalistas al interior de este movimiento de mujeres democrático y único en el mundo. 


¡Arriba las trabajadoras que luchan por sus derechos!